Hasta el 2013 se verá una renovada feria del libro

Mientras no exista un lugar adecuado para el público y los expositores, la feria no tendrá invitados internacionales.

La presencia de invitados especiales, espacio amplio y parqueo, actualmente la parte negativa de la XVI Feria Internacional del Libro, se harán esperar hasta el 2013.
El presidente de la Cámara Departamental del Libro, Ernesto Martínez, en una breve evaluación, comentó que lo más complicado en los 11 días de exposición fue contar con el espacio adecuado y el parqueo, pues el COE no reúne las condiciones para realizar acontecimientos de gran magnitud como en este caso, una feria.
Cerca de 70.000 visitantes. Martínez dijo que a pesar de esas limitaciones, se logró rescatar espacios y que hasta la FIL llegaron 70.000 visitantes. “El COE tiene 1.800 metros para el área de exposición, pero para la feria se habilitó 2.700 metros y hubo 70.000 personas, eso es lo positivo”.
Añade que dentro de lo provechoso está la amplia convocatoria de la charla sobre el libro digital, que juntó a libreros, editores e importadores. Esto ha demostrado que existe preocupación acerca del libro digital, en cuanto a aprehender los nuevos esquemas de trabajo. “En líneas generales, estoy contento de cómo terminó la feria”.
Las buenas condiciones serán para 2013. Con la experiencia de la exposición en el COE, Martínez no descarta que en 2012 los ambientes de Calacoto continúen albergando a la FIL. “A 24 horas de finalizada la feria no podría decir si nos vamos a otro lado, consideramos que otros lugares son menos adecuados que el COE”, comentó.
Acerca de los invitados especiales, aspecto que caracterizó a las FIL de otras versiones, Martínez aclaró que “mientras no se tenga definido un buen espacio, el próximo año, tal vez, nos vamos a cohibir de hacer una invitación. No hay estructura suficiente, esperemos que el Campo Ferial de Bajo Següencoma se termine en el plazo establecido, es decir en 2013, y es cuando vamos tener invitados”.
Críticas. La impresión del autor de la novela El amor según, Sebastián Antezana, es que, con el pasar de los años, la organización de la feria ha decaído.
Antezana comparó la experiencia de La Paz con la de Santa Cruz, en esta última se da mayor convocatoria, mayor espacio, calidad de oferta y también se registra una buena venta de libros.
Mencionó que si bien la feria paceña es la más antigua del país y a pesar de que se denomina “internacional”, no cuenta con invitados extranjeros, lo que no sucede en Santa Cruz, donde el atractivo principal es la presencia de autores extranjeros.
Su colega, Mauricio Murillo, autor de El torturador, criticó que los stands no tenían una buena oferta de libros del exterior, pero ponderó que eran cómodos en el momento de visitarlos.
Ante estas apreciaciones, Martínez comentó que Santa Cruz tiene la ventaja de contar con un campo ferial amplio, aunque incluso así no son adecuados.
Finalmente, Sebastián Antezana señaló que es necesario que las editoriales y alguna instancia del Gobierno gestionen el ingreso de libros extranjeros, pero cuidando de que sean a buen precio para atraer a más lectores en las próximas versiones de la FIL.

70 mil es la cifra de visitantes que acudió a la XVI Feria Internacional del Libro en el COE.

Evaluación en las próximas semanas. Hasta ayer por la tarde, el presidente de la Cámara Departamental del Libro de La Paz, Ernesto Martínez, no se animó a menacionar la cantidad de libros vendidos que registraron las distintas editoriales y librerías participantes en la FIL. “En general, la mayoría de las empresas tuvieron un buena venta y sentí que la mayoría de los expositores estaban contentos”.
Reunión con socios. Los socios de la Cámara evaluarán en detalle durante los próximos días los pros y contras de la Feria que culminó el pasado domingo. Hace cinco años, el evento ocupaba un espacio de 3.000 metros en el Campo Ferial de Bajo Següencoma, el 2010 llegó a extenderse a 4.500.