jueves, 29 de marzo de 2012

“Ángeles en la tierra”: Conozca las historias de niños que luchan contra la adversidad

Eduardo Rivera Coordinador de Comunicación de Yanbal y Mónica Méndez directora de la Asociación que Vivan los Niños durante la presentación del libro.

La sala de Oncología Pediátrica del Hospital del Niño “Dr. Ovidio Aliaga Uría” en La Paz, ha sido el mudo testigo de cientos de historias de pequeños valientes, que han luchado por su vida contra el cáncer, saliendo victoriosos en muchos casos y en otros convirtiéndose en angelitos de Dios. Una enfermera se

Una enfermera se preocupó de recopilar estos relatos en el libro “Angeles en la tierra”, que fue presentado por la Asociación que Vivan los Niños en el Hotel Radisson de La Paz, con la finalidad de recaudar fondos para el tratamiento de este padecimiento y la construcción de la Casita de Paso.

“Durante las noches que yo pasaba con los niños empecé a escuchar, como ellos me pedían ayuda, yo sueño un día con ser un doctor, otro decía yo quiero ser un chofer y otra niña yo quiero ser profesora, pero mis venitas están quemadas, porque las agujas al poner el suero se infiltran, al oír estos pequeños relatos me sentí muy conmovida y es cuando me propuse escribir estas historias para que la gente conozca cómo llevan adelante su enfermedad estos niños en su lucha diaria, convirtiéndose en verdaderos héroes, en ángeles de Dios, pero que habitan en la tierra, así nació el nombre del libro”, expresó la enfermera Ayda Lanza, quien trabaja hace 25 años en el Hospital del Niño.

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El libro reúne cerca de 30 testimonios de niños que pasaron y que aún están en tratamiento del cáncer infantil, sus edades oscilan entre los 5 a 14 años de edad, se han autodenominado como los ángeles de la alegría, libertad, esperanza y honestidad. Estuvieron algunos de ellos presentes en el salón Tihuanacu del Hotel Radisson, para presentar sus historias de vida.

“Muchos niños salían y otros se internaban en el transcurso de la edición del libro, es así que esperamos que en algún tiempo se pueda replicar esta experiencia, con el relato de otros niños. Recientemente tuvimos el caso de un recién nacido con cáncer en el testículo, el mismo que ya está curado, así como él muchos otros tienen esperanza de vida, lo importante es iniciar un tratamiento oportuno para que el día de mañana puedan cumplir sus sueños”, explicó Lanza.

La directora de la Asociación que Vivan los niños Mónica Méndez agradeció a las empresas y personas que hicieron posible la publicación de este libro como Yanbal, Jaime Cisneros, Nancy Dorado, Felipe Ruiz y Fundación San Luis, entre muchos otros e invitó al público para que adquiera esta publicación y pueda contribuir para el tratamiento de los niños y la construcción de una Casita de Paso, para que los padres puedan continuar con el tratamiento de sus hijos.

“Los invitamos a que puedan comprar el libro en la Feria Infantil Juvenil del Libro a realizarse del 7 al 15 de abril en el Hotel Los Delfines, en la Librería Lectura de San Miguel, en la Asociación que Vivan los Niños o llamar a los celulares 70112236 y 77241280”, acotó Méndez.

miércoles, 28 de marzo de 2012

Presentan Llunk’ucracia, política vista con humor

La revista de humor político “Llunk’ucracia” fue presentada anoche, en La Paz, en el Museo Nacional de Arte, con la participación del escritor Manuel Vargas, Antonio Peredo y del director del museo, Edgar Arandia.

“La sociedad boliviana está sometida a un alto consumo de contenido político a través de los medios, es una sociedad sobreexpuesta a la política; pero desideologizada, entonces necesita un respiro saludable en medio del bombardeo político y Llunk’ucracia ofrece humor gráfico trabajado desde una óptica periodística”, explicaba ayer el portavoz de la publicación, Victor Hugo Romero, desde La Paz.

Romero señala que la revista dice lo que el periodismo tradicional no puede decir, pero manejará humor que “no agrede, es sano, no adjetiva ni se mofa de la idiosincrasia o los defectos del boliviano”.

La revista es un producto del denominado Colectivo de Pensamiento Político Satucos, grupo afín al MAS, liderado por Gustavo Torrico. Romero señala que el Gobierno de turno también será materia prima para la revista que maneja como consigna “caiga quien caiga”.

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Escritores bolivianos de exportación

Ya se aproxima la Feria Internacional del Libro y hay novedades en cuanto a la literatura nacional y su trabajo en el exterior.

Cabe rescatar que en los últimos dos años escritores como Giovanna Rivero, Maximiliano Barrientos, Rodrigo Hasbún y Liliana Colanzi han tenido fuerte actividad internacional además de haberse sumergido de lleno en su actividad.

Jóvenes escritores. Giovanna Rivero el año pasado fue elegida como uno de los 25 tesoros literarios a la espera de ser descubiertos por la Feria Internacional del Libro en Guadalajara. En 2011 publicó la novela corta "Alkalá Thriller", en el volumen "Crónicas de Oreja de Vaca", con el sello Bartleby (España). También publicó distintos cuentos en antologías internacionales.

Según Rivero, las publicaciones "menores" (cuentos en antologías o revistas virtuales) constituyen una puerta "valiosísima" para el escritor y la escritora que aspiran a la internacionalización. “No hay que subestimar el valor y la importancia del paso a paso. Yo confío mucho en el paso a paso, y en la trascendencia del trabajo”, señala la escritora cruceña.

El 2011 también fue un gran año para Maximiliano Barrientos, que publicó con la editorial española Periférica dos de sus obras: "Fotos tuyas cuando empiezas a envejecer" y "Hoteles". Mientras tanto, Rodrigo Hasbún, en 2010, fue elegido por la revista británica Granta entre los 22 mejores escritores de lengua española menores de 35 años. Ha publicado el año pasado con la editorial española Duomo.

Entre lo más reciente se encuentra el caso de la escritora cruceña Liliana Colanzi, que el año pasado publicó "Vacaciones permanentes" (VP) en la editorial argentina Reina Negra. Además ha firmado contrato con la editorial Tropo (España) para que VP salga en el 2013. Actualmente Colanzi se encuentra en Madrid escribiendo un segundo libro de cuentos que se llamará "Mordor". Acerca de la publicación en el exterior ella cree que se trata más que todo de una falta de redes, aunque muchas veces los congresos facilitan este tipo de contacto. Además, Colanzi piensa que ayuda muchísimo la presencia de escritores bolivianos en el exterior que sean capaces de recomendar a otros. “Lo importante es que comprendamos que nadie nos va a ayudar más que lo que podamos ayudarnos entre nosotros. Bolivia viene de una cultura de la escasez, y muchas veces existe la percepción de que si uno logra abrir una puerta, eso significa que las otras se cierran para los demás, cuando en realidad es todo lo contrario“, señala.

Fuera del país. La editorial independiente “El Cuervo” ha publicado dos antologías en Buenos Aires, en la librería Eterna Cadencia. La primera junto con Nuevo Milenium llamada “Bolivia a toda costa“ crónicas de un país de ficción que resultó ser uno de los libros más vendidos de diciembre y otra antología llamada la Condición Pornográfica, seleccionada por Salvador Luis Raggio, conocido compilador de antologías de literatura iberoamericana y fundador de la revista Los Noveles.

Algunos de los escritores editados en la Argentina y España.

Bolivia a toda costa (El cuervo-nuevo milenium) Tiene la participación de Alexis Ayala, Javier Rodríguez, Liliana Carrillo y Darwin Pinto, entre otros.

Vacaciones permanentes (Reina Negra - Argentina)
Fue el cuarto título del catálogo de la editorial manejada por J.M Candal, la ilustración de la tapa es de Alejandra Alarcón.

Fotos tuyas cuando empiezas a envejecer (Periférica -España) Además de la edición revisada del libro de cuentos y Nouvelle Hoteles.

martes, 27 de marzo de 2012

Los cuentos de la mina de Víctor Montoya se leerán en 5 idiomas

Editada varias veces en español en Bolivia, Suecia, España y México, Cuentos de la mina, del escritor paceño Víctor Montoya, acaba de ser publicada en francés y ya se prepara, para los próximos meses, las versiones en alemán, sueco e inglés.

Según el escritor radicado en Suecia desde hace más de 34 años, la edición francesa del libro, “que reúne 25 cuentos narrados en clave de realismo mágico”, fue editada con el título de Contes de la mine - conversations avec le Tio por la editorial parisina L’ Harmattan.

Traducida por la investigadora francesa Émilie Beaudet, la obra cuenta además con algunos relatos del próximo libro de Montoya: Conversaciones con el Tío, y con trabajos de los fotógrafos Jean-Claude Wicky y Stanislas de Lafon “que ilustran la cotidianidad minera boliviana”.

Al rescate del Tío

En diálogo con Página Siete, además de confirmar que ya tiene acuerdos cerrados para futuras traducciones a otras tres lenguas, el autor reconoció que el principal protagonista de su narrativa es el Tío de la mina, un personaje de la tradición popular andina que “espero rescatar para la memoria colectiva, así como Saenz hiciera con el aparapita”, comentó.

“Quiero que un día el Tío se constituya en un personaje reconocido de nuestra vitrina literaria internacional, porque es un ser único, complejo, esotérico y por eso muy representativo de todo nuestro sincretismo religioso y cultural”, sostiene Montoya.

“El Tío tiene un valor universal que tiene que ver con los testimonios religiosos y con el mundo subconsciente del ser humano, con su lado bueno y su lado malo, por lo que considero que posee todos los elementos que un autor necesita para estructurar un buen personaje”, afirma el escritor nacido 1959.

Es precisamente este “carácter universal” del Tío, junto a las historias fantásticas de la tradición oral en las que se presenta, lo que, según agrega, permitió que Cuentos de la mina haya sido acogido positivamente en entornos culturales completamente distintos al boliviano, desde su primera impresión en 2000.

“El realismo mágico no vive sólo en la obra de Gabriel García Márquez, Juan Rulfo o Alejo Carpentier; está en cada rincón de nuestro continente y más en Bolivia, que de por sí es un país mágico y secreto. Vivimos en un mundo mágico... éste es el único país donde los diablos bailan para la Virgen, donde el cura bendice a los diablos en plena iglesia”, comenta.

Pero más allá de este exitoso compendio de relatos que pronto podrá leerse en cinco lenguas, el autor admite que, en general, la tradición oral de los pueblos mineros es su mayor fuente temática.

“No hago folklore o etnografía con estos cuentos, no hago lo que don Antonio Paredes Candia quería rescatar a través de su escritura; lo mío es literatura pura a partir de mis recuerdos y nostalgias, de mi visión del país desde fuera de él... al contario de muchos autores que escriben aquí pero mirando al exterior” afirma.

Asimismo, el autor sostiene que su trabajo se diferencia de la literatura minera de autores como Augusto Céspedes, Jaime Mendoza o Rene Poppe, en tanto “no se aproxima a la realidad del minero o a sus luchas sociales, sino que pretende rescatar su imaginario, su forma de relacionarse con el mundo que le rodea”.

“He tratado de trabajar conscientemente ese lado mágico de la realidad minera, no la parte trágica, no la parte social, porque trato de retratar las mil caras que tiene el país, no sólo una”, comenta.

Letras traducidas
Traducciones Pocos son los autores bolivianos cuya obra fue traducida a otros idiomas, entre ellos destacan Jaime Saenz, que puede leerse en italiano, alemán e inglés; Edmundo Paz Soldán, cuyas obras se difunden en inglés, francés y portugués, y Eduardo Mitre, que tiene versos traducidos al inglés y francés.


Grandes obras El tema de la minería en la literatura boliviana se presentó en obras como Metal del diablo, de Augusto Céspedes; Mina, de Alfredo Guillén; Socavones de angustia, de Fernando Ramírez; El precio del estaño, de Nestor Taboada Terán; Aluvión de fuego, de Óscar Cerruto, y Huanchaca y los Andes no creen en Dios, de Adolfo Costa du Rels. Y en cuento, en antologías como Cuentos mineros del siglo XX, de Pastor Poppe, y Narrativa minera, de Bolivia de René Poppe.

El fenómeno de "Harry Potter" llega a los e-books

Los siete títulos que conforman la exitosa saga "Harry Potter", creada por J.K. Rowling, salieron hoy por vez primera a la venta en formato electrónico en la plataforma web Pottermore, creada por la autora para compartir material inédito con los seguidores del joven mago.

De momento, los siete títulos sólo están disponibles en inglés, aunque según la página pronto ofrecerán las traducciones al francés, italiano, alemán y español, que se podrán leer en un amplio abanico de dispositivos, como libros electrónicos, tabletas y teléfonos celulares.

El director ejecutivo de la web, Charlie Redmayne, que en el pasado trabajó para la editorial Harper Collins, señaló a la web "The Bookseller" que este lanzamiento supone un "gran día" para la marca que representa.

El precio de cada uno de los primeros tres títulos es de 5,97 euros, mientras que los cuatro últimos ejemplares cuestan 8,36 euros. Si se opta por comprar la colección completa, el desembolso será de 46,18 euros.

Con más de 400 millones de ejemplares vendidos en cerca de 200 países, Harry Potter ha batido todos los récords desde 1998. En julio de 2007, el final de la historia se convirtió en el libro más demandado en sus primeras veinticuatro horas, despachándose 8,3 millones de copias sólo en EE.UU.

La saga, protagonizada en los cines por el actor Daniel Radcliffe, comenzó a despedirse de sus millones de fans el pasado 15 de julio, cuando se estrenó la última de las películas: "Harry Potter and the deadly hallows. Part 2".

lunes, 26 de marzo de 2012

Claudia Adriázola presentó “Yo que tú”

Ayer en el hotel Camino Real, la escritora Claudia Adrázola Arza presentó su obra “Yo que Tú”, que mereció elogiosos comentarios.

El año 1998, la autora publicó su primer libro de cuentos Abuelas, Ángeles y Lunas, del que se publicaron varios cuentos en antologías del país y del exterior: La otra Mirada (Alfaguara, 2000) , The Fat Man From La Paz (Seven Stories Press, 2000) y The Year’s Best Fantasy and Horror, Fourteenth Annual Collection (Ellen Datlow and Terri Windling, Publisher St. Martin’s Griffin, 2001).

La obra narra la historia de Nicolás Ríos es un niño de once años como cualquier otro, y le gusta jugar fútbol, salir a pasear con sus papás, ver tele, comer cosas ricas…, pero eso sí, Nico es un poquito más egoísta que los demás, sobre todo a la hora de compartir las delicias que le prepara su abuela Tatis.

Una tarde en el cine, un extraño personaje le ofrece a Nico un artefacto que le dará una capacidad extraordinaria. En esta historia llena de sabores, el protagonista conocerá de manera extraordinaria y misteriosa lo que hay en sus amigos y familiares, dándoles una miradita “desde adentro”.

50 años son nada para mafalda

En una de las biografías de Mafalda se dice que habría nacido el 15 de marzo de 1962. Lo que llevó a parte del mundo que sigue atentamente al personaje, a celebrar este 2012 lo que sería el cumpleaños 50 de la hija más famosa de Joaquín Salvador Lavado, Quino.

Hasta febrero, los preparativos de la fiesta iban viento en popa, hasta que el progenitor se enteró y quiso frenarlos en seco: en su página oficial se puso tajantemente: “El día de su primera publicación fue el 29 de septiembre de 1964 en la revista Primera Plana. Para Quino es el día del nacimiento de Mafalda como personaje de historieta”.

¿Cómo explicar la confusión? El mismo sitio lo intenta: “El mal entendido se debe a que en una tira del propio Quino publicada el 15 de marzo de 1966, en el diario El Mundo, se dice que habría nacido en 1960. Y en la biografía publicada el 2 de junio de 1968, en la revista Siete Días, el autor afirma que nació “en la vida real el 15 de marzo del 62”. Pero: “Ni una ni otra fecha son de tener en cuenta”. O sea, Mafalda tendría no dos, sino hasta tres fechas de nacimiento. Y, aunque Quino “considera que el cumpleaños de Mafalda es el día de su primera publicación en medios gráficos”, y que la cincuentena habrá que esperarla para 2014, nada impide que quienes admiran al personaje quieran, como el Sombrerero de Alicia, cantarle un ¡Feliz incumpleaños 50!

Que hay deseos de festejar lo comprueba Escape, que recibió la extraordinaria respuesta escrita y gráfica de varios colaboradores, toda vez que entre todos estábamos convencidos de que Mafalda alcanzaba ya nomás el medio siglo. Así que, contra la voluntad del padre —que además insiste en que una niña de historieta será siempre una niña—, nos adelantamos a alegrarnos por la madurez del personaje.

Un poquito de historia

Quino presentó a Mafalda en sociedad, como se tiene dicho, en 1964, con cuatro años de edad y la mantuvo activa hasta el 25 de junio de 1973; la niña tenía entonces ocho años. Cosas que sólo la ficción puede explicar: no creció sino cuatro años en nueve que transcurrieron en verdad.

Que al “morir” tenía toda la vida por delante, no se lo auguraba ni su padre. Y aquí está Mafalda, soplando una velita más, sin que haya dejado de ser la persona que escarba, oportuna como en la década en que vivió, en las heridas que la humanidad se empeña en mantener abiertas.

Mafalda es casi la hija no deseada de Quino: “Fue un encargo, no es que a mí se me ocurriera hacer esta familia. Fue un encargo para un anuncio de publicidad que nunca se hizo. Si debía crear un personaje tenía que tener rasgos muy reconocibles, como esa mata de pelo. Y a medida que la publicaba fui conociéndola, no tenía ni idea de cómo me iba a salir el personaje” (El País, Madrid, 2007).

Le salió ingeniosa, respondona, irónica y con la misma mezcla de pesimismo-optimismo del dibujante argentino-español.

Su creador dirá lo que dice, pero lo cierto es que pocos padres pueden ufanarse de tener una hija tan precoz: capaz de hablar más de 30 idiomas, incluido el griego y el chino, sin haber dejado nunca la primaria. Y exitosa: se ha perdido la cuenta de las reediciones de los libros que reúnen las tiras, los homenajes, los inéditos, etc., etc.

¿Qué tiene esta tira de humor que se empeña en estar vigente?

Quino lo explica por el lado positivo: “La gente necesita identificarse con un personaje con nombre y apellido. Es curioso lo que sucede con Mafalda; la gente la toma como si fuese una persona con vida propia. Me acusan: ‘Por qué mataste a Mafalda’. Como si un dibujo pudiera ser matado. Uno deja de dibujarlo, pero no lo mata”.

Y también por el lado negativo: “Si bien me halaga que se siga leyendo, también es triste pensar que los temas de los que hablaba siguen existiendo, a veces tienen otro nombre pero son los mismos. Lamentablemente muchas cosas no han cambiado. El mundo que existía en 1973, cuando dejé de hacer la tira y que Mafalda tanto criticó, está igual o peor que entonces” (El Malpensante, La Razón, 2000) l

‘Es mi compañera y mi conciencia’

Quiero mucho a Mafalda; es mi compañera y mi conciencia. Fue la que enseñó a leer a mis hijos, fue el regalo (Toda Mafalda ) para mi madre en Eslovenia, donde salía con el nombre de Marjanca. Está sentada en mi taller y me mira y se ríe de mí. Supongo que la muñequita que tengo es una de las truchadas que se han fabricado a partir de Mafalda, víctima de incombatible piratería. Como sea, ella está omnipresente y sigue tan mente fresca como cuando el genial Quino la creó. Pobre Quino, no se va a liberar de ella, a pesar de que después ha creado historias puede ser hasta más geniales. Conocer a Quino personalmente, gracias a Mabel Franco, fue uno de los eventos más importantes de mi vida. Poder charlar con alguien que según su trabajo parece entender y sentir la vida hasta la médula en todas sus tonalidades; pero que en vivo es la persona mas tímida y humilde a pesar de su fama mundial, fue una lección de vida. Cuando las musas se resisten a tocar mi puerta, siempre es saludable agarrar algún librito de Quino y no tardan en aparecer.

En este mundo abundan las Susanitas y “la mayoría manda”; pero sin Mafaldas estaríamos peor, ya que cues- tionar todo nunca hace mal a nadie. Ejti Stih, pintora

‘Son personajes tan humanos’

A Mafalda la conoce todo el mundo, desde mi tía más viejita hasta el último de mis sobrinos. Es uno de los personajes de la historieta mundial que más ha impactado en nuestro país. Una de las cosas que no olvido fue cuando Quino, su autor, llegó a La Paz en 2000 (volvió en 2001) invitado a la feria de libro; en esa ocasión, la fila para recibir autógrafos parecía interminable. Da gusto que tantos compartamos la misma afición y afectos. Pienso que una de las cosas que hace genial a la serie de tiras de Mafalda es la variedad de personajes y su carácter tan entrañable, comenzando por ella, por supuesto, y siguiendo con sus padres, Guille, Felipito, Manolito, Susanita, Miguelito y Libertad. Imagino que mucha gente se identifica íntimamente con un determinado personaje o con la suma de distintos rasgos de varios. Son personajes muy humanos. Susana Villegas, artista

‘De Quino valoro su humor sutil’

Mafalda es el primer referente que tuve del mundo en mi niñez; ella me ayudó a digerir eso de la Guerra Fría y otras cosas. Me encantaba que los personajes fuesen niños. Me enteré de que Quino había decidido “matarla” y hoy, yo que soy dibujante, entiendo cómo un artista puede llegar a quedar aprisionado por sus personajes; aunque después supe que tal muerte no era verdad, sigo pensando que matar a un personaje es algo valiente. De Quino valoro el humor sutil de no caer en algo que se suele usar en el humor gráfico: el hígado, el planfleto. Otra cosa difícil para un artista es encontrar una veta. Quizás Quino no se dio cuenta en principio de que la tenía en Mafalda, y creó otros personajes. De todos ellos, me quedo con Guille: si no puede decir “tortuga”, la patea; es como aprender a dejar las cosas sin dramas. Alejandro Archondo (Arxondo), artista

‘Refleja a la sociedad contemporánea’

Quino es por derecho propio uno de los maestros indiscutibles del humor. Con un estilo de dibujo inconfundible, su influencia llega a varias generaciones de humoristas y ha sido imitado y copiado hasta el cansancio. Con Mafalda ocurre lo mismo que con el Chavo del 8: forman parte del imaginario y la cultura popular latinoamericana, más allá de las fronteras. Sus personajes reflejan como pocos a la sociedad contemporánea, pese a haber sido creados hace tanto. Con seguridad, en algún momento hemos conocido a una Mafalda, Susanita, Felipe o Manolito de la vida real. Sus chistes nos harán reír y pensar por muchos años más, pues no envejecen porque son verdadero arte. Gracias por todo y ¡feliz cumpleaños! Frank Arbelo, dibujante y diseñador gráfico

Una amiga íntima

Quisiera recordar cuándo la conocí, en qué momento exacto entró a mi vida y qué impresiones me causó. Exprimo mi memoria, y nada. Me he enterado que es menor que yo (no mucho) aunque, a estas alturas, ¡hasta tres meses cuentan! Supongo que no puedo recordar con precisión porque, sencillamente, fue siempre parte de mi vida consciente, ésa que dicen comienza cuando ya sabemos leer. Las letras, con ella, eran imprescindibles, porque no bastaba verla, rara vez cambiaba la expresión, había que leerla ¡Y de qué manera! Cada frase contaba, porque, aunque solía tener la última palabra, antes que ella y con ella hablaban otros personajes de la familia y del barrio.

Una familia que podía ser como la de una, con el padre trabajando a disgusto en una oficina de mala muerte (Cada día mandamos un hombre al trabajo y ESTO es lo que nos devuelven) y una madre “ama de casa” haciendo milagros con el sueldo y la cocina (¿Mamá, qué te gustaría ser si vivieras?). Un barrio que podría ser el nuestro, con la tienda abierta casi las 24 horas del día (se habla mucho de depositar confianza pero nadie dice cuánto de interés te pagan), las amistades y enemistades en la misma cuadra y la vida siguiendo su curso.

Cómo nos divertíamos

Así es que, como no puedo recordar cuándo la conocí, supongo que crecí (es un decir, porque, como ella, me quedé por debajo del metro y medio). Fue en la adolescencia cuando, en verdad, hicimos amistad. Por precocidad, acceso e ilustración, ella conocía del mundo (el grande, no el del barrio) mucho más que yo. ¡Cómo nos divertíamos! Compartimos preocupaciones casi angustiosas (Dios mío, cuando nosotros dormimos, los chinos ¡trabajan!); la Guerra Fría nos calentaba (Me revienta tener al comunismo por un lado y al capitalismo por el otro, quedamos como un sándwich, y ya se sabe qué les pasa a los sándwiches); las dictaduras no nos podían hacer callar (Hay que respetar los derechos, que no queden como los diez mandamientos); la injusticia nos rebelaba (¿Qué habrán hecho algunos sures para merecer ciertos nortes?) y criticábamos el destino, nunca inevitable, que el medio mediocre quería destinar a las mujeres.

Con Mafalda, esa niña universal, transité desde los 60 hasta casi los 90 en un mundo con Guerra de Vietnam, dictaduras, carrera espacial, asesinato de Kennedy, onda hippie, psicoanálisis, feminismo y mil otras rebeldías (¡Resulta que si uno no se apura a cambiar el mundo, después es el mundo el que lo cambia a uno!) Por eso fue y será mi amiga, aunque ya no hable en tiempo presente y sus angustias parezcan historia. Su historia, la mía. Carmen Beatriz Ruiz, comunicadora social

‘Trascender, sólo lo logra un genio’

Hay una anécdota que lo resume todo: hace unos tres o cuatro años, le preste el libro Toda Mafalda a la hermana menor de Karen Gil (ilustradora), quien nunca había oído hablar de Quino. Se leyó el libro de principio a fin muchas veces y se volvió uno de sus favoritos. Mientras ella lo leía, hablábamos sobre los chistes y ella los entendía perfectamente. ¿Se dan cuenta? Muchos son chistes sobre la coyuntura política de hace casi 50 años y los puedes leer mañana y los vas a comprender y reírte con ellos. Que tu obra trascienda los cambios sociales, políticos, estéticos, tecnológicos, etc., y que siga asombrando a quien se la encuentre por primera vez, medio siglo después que la escribiste, eso sólo lo logra un genio. Marco Tóxico Guzmán, historietista

Mafalda, el origen

Cuando nos conocimos con Mafalda teníamos casi la misma edad. Hacía poco que habíamos regresado a Buenos Aires con mi familia después de algo menos de un año viviendo en San Diego, California. La democracia se acababa de reinstaurar en la Argentina y mi padre decidió —en lo que aún hoy llama su “último ataque de credulidad”— que había que volver. Un día llegó a mis manos un enorme libro muy desgastado, sin lomo, de tapas duras y grises que se empeñaban en soltarse de la precaria encuadernación, y donde estaba dibujada una niña de enorme melena negra, un moño rojo y calcetines verdes: Diez años con Mafalda.

Recuerdo la violenta sacudida de aquel primer encuentro. No entendía muchas de las cosas que decía esa niña criticona, ingeniosa y avasalladora. Otras veces sus ocurrencias y las de sus amigos hacían que rompiera a carcajadas tan fuertes que podía oír a mis padres riendo por contagio en la habitación contigua.

Sin embargo, no estaba sólo en el humor el secreto que me tenía embrujado durante horas. Había algo en la combinación de los cuatro trazos y las pocas palabras que conformaban cada viñeta que me interpelaba. Algo latía ahí en un lenguaje anterior a los Beatles, a la guerra de Vietnam, a la liberación de la mujer y a la sopa. Un lugar anterior a todo, primitivo y deslumbrante, del que surgía el mundo entero que podía contarse con la fuerza bestial de esos cuatro trazos, desde donde Mafalda me hablaba. Mafalda era un oficio que me miraba directamente a los ojos con sus ojos redondos de tinta china y me decía en un lenguaje que entendía sin entender: “Tú eres esto”.

Y la miraba fascinado, como la ardilla mira las fauces del lobo que la está por devorar.

La fascinación se repite

Años después, cuando ya entendía los chistes, he vuelto a sentir esa fascinación primordial al leer el cuento El libro de arena de Borges —del que también se me escapaban muchas alusiones (y me pregunto si para sentir ciertas epifanías no será importante no entenderlas del todo). Y, sobre todo, he vuelto a encontrarla en la música: en un susurro de Leonard Cohen, un alarido de Tom Waits, de Goyeneche, de Chavela Vargas, de Brel o de Camarón; en el quejido de un cantor anónimo en el barrio viejo de Nápoles o de Lisboa.

Mientras, como se sorprendía Miguelito, “el tiempo no se atranca nunca”. Mafalda, por muchos años que cumpla, sigue teniendo la edad que teníamos entonces y yo, por su culpa, sigo siendo dibujante.

También como ella, hay mañanas, desde mi cama, en las que “cuesta juntar ánimos para bajar al mundo”. Martín Elfman, dibujante

‘Qué afán de interpelación’

Mi generación ha crecido con Mafalda. Hemos crecido con Mafalda. Lo que más me ha gustado siempre de este personaje creado por Quino es su capacidad de interpelación.

Y ahí están todos los personajes que la rodean y nos han permitido identificarnos con su manera de ver el mundo. En mi caso, en quien mejor me siento reflejado es Felipe, toda la vida. Mafalda me gusta, aunque hay algo que no acepto de ella y es que no le guste la sopa, que a mí me encanta. Cergio Prudencio, compositor y director de la Orquesta Experimental de Instrumentos Nativos

Un mundo entre Weber y Mafalda

Haber descubierto como estudiante universitario a Max Weber me llevó al campo de las ciencias sociales. Yo, que había empezado en Bolivia a estudiar Derecho y Filosofía, terminé en Sociología, en Lovaina, luego en Ginebra y París. El planteamiento de Weber, en un momento en que el marxismo se imponía en los ámbitos académicos de Europa y Bolivia, fue algo novedoso, pues vinculaba las formas de ética con la acumulación del capital, dando además otros papeles a las clases, los estamentos y los partidos (con la ideología de la religión protestante). Me movió el piso, dándome otra visión de la realidad, más escéptica, menos determinista, que he mantenido siempre.

Al terminar la universidad, quise hacer mi tesis sobre él, pero un profesor me puso en el rumbo del mundo campesino de Bolivia. En esos años apareció Mafalda. Su ingenuidad y candor eran lo opuesto al ascetismo de los protestantes; las clases medias bonaerenses, con sus ambiciones se abrían al consumo, con los dilemas e ironías, desgarres que ese fenómeno producía en el plano familiar, social y cultural. El humor de Quino denunciaba la aparición de esos fenómenos,el antagonismo de los moldes viejos con los cuños nuevos.

La tira se burlaba de los intelectuales, profesionales, del autoritarismo, de la empleomanía, del trabajo monótono, las burocracias en las que desembocó inesperadamente el racionalismo weberiano. Nadie dejó de leerla. Aprendimos mucho y reímos más de nuestras propias ambiciones. Ya no eran los temas de clases, pero sí el de la libertad, de los derechos individuales.

Quino nos sacó del reducido mundo del capital y el trabajo y vivió lo de mayo del 68, que rompió los moldes de antes , haciendo aparecer los problemas de la planificación racionalizada, de sus beneficiarios y de sus víctimas, algo que Weber entrevió.

Mafalda, en su origen, coincidió con mi regreso a Bolivia. A mi hijo Salvador Ignacio solía leerle Mafalda y le dibujaba afiches, como el “del palito abollador de ideologías”, recogiendo una vieja afición de mi niñez de dibujar. Nos divertíamos mucho con ella que, me daba cuenta, engarzaba bien con las visiones de vida de alguien que como yo pertenece a la clase media y creía que las racionalizaciones son causa de irracionalidades de las que valía la pena sonreír.

En el trabajo, siempre con Weber en mente, me dediqué a hacer chistes a los estudiantes con temas de Mafalda y su clase que no era la que el alemán tenía en mente.

Luego de estudiar (en Punata y Mizque), la adhesión de los campesinos a los partidos políticos o al sindicato, opté por hacer mi doctorado en Europa. Trabajé sobre los movimientos campesinos en Bolivia. Fui el primero en considerarlos y en plantear la presencia de lo que llamé movimientos “arcaicos y modernos”, buscando su sentido global. Y en ese momento, Mafalda me ayudaba a comprender cómo se pensaban las clases medias en ese mundo donde ya comenzaba a perder protagonismo la ruralidad, los campesinos y el obrerismo.

El mundo de Mafalda es el de una clase media que ascendió y recibió los conflictos de una modernidad centrada en la racionalización, no falta de inconsistencias, que Mayo del 68 iba a mostrar en toda su fragilidad. La chiquita cándida e inocentona decía cosas muy serias sobre la vida, los padres, el mundo desde su lugar en las clases medias, que tampoco era el actor del futuro. ¡Qué porvenir para Manuelito, cortando su mortadela en un mundo de ordenadores!

Y me afirmó en la convicción de que la política no se puede hacer para un solo conjunto social , cortado del resto del todo. Tal vez por eso Mafalda, Guille, Susanita desaparecieron cuando el modo de producción informático copó la sociedad.

Mafalda hace falta ahora, en tiempos en que las divisiones se profundizan con falsos discursos sobre lo ancestral, la comunidad. lo auténtico. Ella me asentó en mi visión de que la política nacional debe abarcar a las distintas clases, incluida la media que es el lugar de la llegada de los sectores en ascenso, el elemento de engarce, sobre todo en Bolivia. No he dejado de leerla, no al mundo que no acabó de cuajar en América Latina, que también aparece en otros agudos cartones de Quino. Salvador Romero Pittari, sociólogo

El premio de cuento breve tiene a sus ganadores

Tres jóvenes se convierten en promesa de las letras locales gracias a un concurso literario que se ha consolidado en el país: el Premio Nacional de Cuento Breve, organizado por la revista EXTRA de EL DEBER, cuya XIV versión tiene a su ganador y dos menciones. Se trata de Fabricio Aguilera Galviz, que presentó el cuento La letanía, mientras que Otro día más en la oscuridad, escrito por Guerlain Rut Maturana obtuvo una primera mención y Brenda Kyoko Oroza Díaz, autora de Un nuevo amanecer se llevó una segunda mención.
Fabricio escribió el cuento con tres historias al azar como una especie de calentamiento. No estaba satisfecho con ellas. Luego retomó el relato que trata sobre la contemplación y la acción sobre la vida de una persona. “El personaje principal ve pasar toda su vida delante de sus ojos. Pero una chica lo motiva para terminar con su letanía”, contó Aguilera sobre la obra ganadora.
Por su parte, Guerlain confesó que tenía planeado concursar en la versión de 2010 pero al final se desanimó. Este año tuvo más decisión y la suerte de obtener una primera mención gracias a una historia sobre un joven que vive con su madre, adicta a las drogas. “Un día estaba en el mercado y me nació la idea de escribir un cuento sobre prostitución, pero fui descartando la idea para terminar escribiendo esto”, dijo Maturana.
A su vez, Brenda se animó a participar en el concurso motivada por dar a conocer su visión de la sociedad en que vivimos. “Hay mucha inseguridad, desmembramiento familiar y perdidas de los valores en Bolivia. Uno tiene tantos problemas que piensa que no hay salida. A través de mi cuento quiero expresar que la respuesta está en nuestros corazón”, expresó Oroza.
El jurado del premio estuvo conformado por Heide Zürcher, profesora, socióloga y pedagoga; Leyla Anas, editora de Escenas de EL DEBER, y Gabriel Chávez Casazola, periodista y poeta. Los tres reflexionaron acerca de los 62 textos que entraron al concurso. Además de considerarlos como una ‘instantánea’ de los temas que hoy preocupan a los jóvenes, destacaron la economía de palabras, el uso creativo del lenguaje al reproducir las rutinas y la vida de los estudiantes, con manejo de la ironía. Leyla Anas destacó el ritmo de las narraciones.
Los jueces recomendaron más lectura. “No hay un buen escritor que no lea”, dice Chávez, aunque tampoco desdeña otras influencias como el cine o la música. “Se nota que algunos de los concursantes leen verdaderamente”, comenta Zürcher, que pidió un poco más de imaginación al trabajar los títulos.
El acto de premiación se realizará el jueves 29 de abril, a las 11:00, en EL DEBER.

Un certamen consolidado en el país
En 1998 el Diario Mayor EL DEBER creó el Premio Nacional de Cuento Breve, a partir de una iniciativa de Pedro Rivero Mercado, director de esta casa periodística.
Desde la primera versión la parte organizativa ha quedado a cargo de la revista dominical EXTRA, que lanza la convocatoria y reúne a los jurados que evalúan los trabajos.
Se trata de un certamen que desde un principio ha estado dirigido a los jóvenes, con 18 años como edad límite para que participen con sus relatos. La temática de los trabajos es abierta y depende del criterio y la inspiración de los autores.
Algunos de los ganadores del Premio Nacional del Cuento Breve han visto cómo este concurso ha representado un impulso para consolidarse en el ámbito literario. Es el caso de la poeta Emma Villazón, que lo ganó en 2004.



Brenda Kyoko Oroza Díaz
Tiene 16 años.
Estudia en el colegio Británico.
Le gustan las novelas y las historias de motivación.
Hasta los 8 años vivió en Tokio (Japón)

Fabricio Aguilera Galviz
Tiene 17 años.
Estudia en el colegio Alemán.
Su obra favorita es El Principito.
Es la primera vez que participa en un concurso literario. Está feliz por haber ganado.

Guerlain Maturana Meza
Tiene 18 años.
Estudia Comunicación en la UPSA e Idiomas en la Uagrm.
Su escritor favorito es Gabriel García Marquez. Quiere seguir escribiendo

domingo, 25 de marzo de 2012

Más sobre la autoría de las memorias de Juan de la Rosa

Como se recordará, en el artículo titulado Nataniel Aguirre no es el autor de Juan de la Rosa, el escritor Gustavo García negó que Nataniel Aguirre fuera el autor de “Juan de la Rosa” y expresó que dichas Memorias “...hay que aclararlo bien, son un texto histórico y no una novela” (La Razón, 19/09/10).



Esa aseveración fue refutada por Jaime de la Fuente Patiño en dos artículos publicados en Los Tiempos (30/10/10 y 2/01/11), en otro artículo de Adolfo Cáceres Romero (Los Tiempos 16/01/11), una tercera nota periodística de de la Fuente (Los Tiempos 20/02/ 11), a lo que se suma un artículo de Alba Paz Soldán (“Nueva Crónica” N° 73 de noviembre de 2011) quien, aunque no duda que Nataniel Aguirre sea autor de esas Memorias, valora que se abra el interrogante sobre la autoría de la obra en cuestión. Finalmente, el primer día de enero de 2012 apareció en Los Tiempos una última nota de de la Fuente titulada “Insólito: Se vuelve a negar la autoría de Nataniel Aguirre”, en la que hace una alusión directa a los suscritos y que es preciso replicar objetivamente.

En ese artículo de la Fuente sostiene que en el libro La segunda revolución de Cochabamba (que publicamos para conmemorar el bicentenario de este trascendental evento) “...lamentablemente se presenta la famosa novela de Nataniel Aguirre: “Juan de la Rosa. Memorias del último soldado de la Independencia”, como si no hubiese sido escrita por él, sino por el militar retirado Juan de la Rosa (Juan Altamira Calatayud) y de esta manera, se vuelve a negar la autoría de Aguirre sobre su más importante obra, corroborando indirecta¬mente la teoría del literato Gustavo V. García publicada en La Razón el 19 de septiembre del año pasado; teoría que es equivocada y que fue refutada por el profesor e investigador literario Adolfo Cáceres Romero en este periódico (16/01/2011) y en tres artículos que publiqué en este matutino”, para luego agregar que “...los Antezana no parecen haber leído estas publicaciones, ni presentan pruebas documentales de la existencia del militar retirado”.

Corresponde aclarar que nuestro libro sobre la revolución del 29 de octubre de 1811 es una compilación de documentos históricos emitidos hace 200 años atrás, a la que incluimos cinco importantes testimonios documentales, entre ellos un capítulo del libro titulado “Memorias del último soldado de la Independencia. Cochabamba” impreso en 1885 por la Imprenta de El Heraldo, libro en el que, en letras grandes, aparece como único autor el señor Juan de la Rosa.

ANTEZANA EN LA CORONILLA

Al terminar su artículo, de la Fuente afirma que esencial y notoriamente la novela escrita por Nataniel Aguirre estaría basada en los Apuntes para la Historia de Cochabamba de Eufronio Viscarra (1882) y que Aguirre “repitió notorios errores históricos de obras anteriores que después serían rectificados, como, por ejemplo … indicar que el Prefecto patriota Mariano Antezana estuvo presente en el combate de la Coronilla, cuando estuvo refugiado en un convento (Viscarra: Biografía de Esteban Arze)”.

En esas sus dos obras E. Viscarra omite señalar que Mariano Antezana haya participado en el combate de la Coronilla del 27 de mayo de 1812 y expresa que ese día “...perseguido por las turbas se evadió hasta ocultarse en el templo de La Merced, para trasladarse al día siguiente al convento de la Recoleta, donde fue aprehendido por los sayones de Goyeneche”; versión diametralmente opuesta a la de Juan de la Rosa quien afirma que aquella fecha, siendo “...imposible ordenar de algún modo esa confusa y bullente masa popular, que sólo ansiaba salir al encuentro del ejército de Goyeneche, el buen prefecto tomó sencillamente la delantera, siguiéndole algunos caballeros, iban después los milicianos, escasos soldados y las mujeres arrastrando los cañones”, hacia la colina de San Sebastián donde se produjo el combate.

El testimonio sobre ese suceso histórico descrito con muchos más detalles por Juan de la Rosa, es sólo un ejemplo de que sus Memorias no se basaron “esencial y notoriamente” en el texto de Viscarra puesto que, de haber sido así, ambas versiones no serían tan contrapuestas.

En cualquier caso, si es tan grande el interés por negar que Antezana participó en la batalla, los interesados deberían pedir al municipio de Cochabamba que retire la placa instalada en la parte sur de la Plaza de Armas, en la que se expresa “Aquí fue fusilado y decapitado el patriota don Mariano Antezana por orden de Goyeneche, el 28 de mayo de 1812, después de haber combatido en la Coronilla en defensa de la libertad patria”. Pero, inclusive negando el testimonio de Juan de la Rosa, retirando la palabra oficial sentada en dicha placa y mostrándose documentalmente que Mariano Antezana no participó en dicho combate, eso no haría ninguna mella en su imagen de ínclito protomártir cochabambino toda vez que en los documentos suscritos con su firma, en los hechos de armas y en la administración pública, es palpable su frontal oposición al colonialismo europeo y la contribución a la causa de la independencia con sus servicios, su fortuna y su propia vida.



DE LA EDITIO PRINCEPS

Si el investigador de la Fuente deseaba expresar su malestar porque de nuestra parte “insólitamente” presentásemos “la famosa novela de Nataniel Aguirre como si no hubiese sido escrita por él”, no debía referirse sólo a nuestro libro sobre la Segunda Revolución de Cochabamba, sino que debía remitirse al artículo titulado “El coronel Juan Altamira Calatayud es el creador de Juan de la Rosa” que publicamos en La Razón del 26 de septiembre de 2010.

En esa nota detallamos la historia tanto de la primera publicación de las Memorias del último soldado de la Independencia en el periódico El Heraldo (impresas en 84 números seguidos, ediciones Nº 867 a la Nº 951, entre enero y agosto de 1885) como de la editio princeps, primera edición, de esta obra en formato de libro; en ambos casos suscrito por Juan de la Rosa.

Asimismo, comentamos las características de la segunda edición publicada en 1909, por una empresa editorial de París, con prólogo de Eufronio Viscarra en el que, por primera vez, se le atribuye a Nataniel Aguirre la autoría de esta obra.

ES INCORRECTO ACUSAR DE PLAGIO A NATANIEL AGUIRRE

Si bien coincidimos en algunos puntos con el referido artículo de Gustavo García, cabe aclarar que no nos suscribimos en ninguna teoría en contra de Nataniel Aguirre que tuviera por objetivo poner en duda su integridad moral. Todo lo contrario, sería totalmente incorrecto acusar a Nataniel Aguirre de haberse apropiado de dicha obra y que es fundamental considerar los antecedentes sobre el origen y vicisitudes que tuvo ese libro “...por la necesidad de reivindicar al patriota Juan de la Rosa como único autor de sus propias memorias y, asimismo para reivindicar la ilustre memoria de Nataniel Aguirre que nunca fue plagiador y que, antes de reconocer paternidad alguna sobre la creación de esta obra, había fallecido en 1888, es decir 21 años antes que terceras personas arbitrariamente le atribuyeran la autoría de la misma”, como expresamos en nuestra nota.

POR QUÉ N. AGUIRRE HABRÍA OCULTADO SU IDENTIDAD

Jaime de la Fuente dice que Nataniel Aguirre usó un pseudónimo para escribir las Memorias y ocultó su identidad “porque hubiese sido criticado por escribir novelas, en vez de proseguir con su obra histórica sobre dicha conflagración (guerra del Pacífico) que publicó en 1882-1883”; "argumento completamente especulativo, toda vez que en la misma edición de El Heraldo Nº 952, aquél publicó su ultra romántica novela titulada “La bellísima Floriana”, sin ningún temor a la supuesta crítica política de la época.

Es más, de la Fuente indica –con otro argumento subjetivo y carente de valor real– que Nataniel Aguirre no quiso “revelar su propia identidad bajo dicho seudónimo pues tenía motivos para hacerlo”, ya que “...Aguirre era descendiente de funcionarios realistas relacionados con su novela y el escribirla con su nombre, pero haciéndose pasar por un coronel patriota, se habría visto como algo incongruente y le hubiera restado credibilidad” a lo que añade que el abuelo materno de Aguirre fue José Gonzáles de Prada, el Gobernador realista de Cochabamba, que su bisabuelo fue el Comandante Gerónimo de Lombera, que su abuelo paterno fue Tomás de Aguirre, realista, Contador de las Cajas Reales de Cochabamba y que su padre, Miguel María de Aguirre, también fue funcionario realista; para concluir reafirmando que “salta a la vista que Aguirre, para dar mayor credibilidad a su novela, se presentó a sí mismo como el coronel Juan de la Rosa que narra sus memorias”.

Tan notables antecedentes de una ascendencia realista y el hecho de que esa obra de principio a fin sea completamente antirealista, nos obliga a preguntarnos ¿Es verosímil que Nataniel Aguirre se haya hecho pasar por un coronel patriota sólo para no ser “incongruente” con sus parientes antipatriotas? ¿Es posible creer que la integridad de Nataniel Aguirre le hubiese permitido llegar al extremo de ocultar su verdadera identidad y presentar una novela imaginaria, mezcla de ficción y realidad, sólo para que su obra no carezca de “credibilidad”?

Creemos que no y pensamos que ese tipo de especulaciones lo máximo que consiguen es hacer un flaco favor al personaje que pretenden defender. No es admisible que N. Aguirre haya sido un impostor que recurrió a un nombre falso para escribir en contra de los realistas y especial-mente contra su bisabuelo Gerónimo de Marrón y Lombera quien, no se debe olvidar, ordenó a sus tropas cometer crímenes inauditos contra los patriotas que se le enfrentaron en la batalla de Amiraya de 13 de agosto de 1811 y en el combate de la Coronilla de 27 de mayo de 1812.

EXISTENCIA REAL DE JUAN DE LA ROSA

No creemos que exista “una desafortunada teoría en contra de Nataniel Aguirre”, puesto que sería reducir a un inexistente malintencionado agravio personal, lo que es una investigación científica que está en evolución. Es muy probable que Juan de la Rosa haya existido realmente, como lo demuestran no sólo sus propias memorias, sino nuevos datos emergentes de la indagación histórica. Así, por ejemplo, en la edición Nº 952 del 3 de septiembre de 1885, el periódico El Heraldo de Cochabamba expresa textualmente: “El benemérito coronel Juan de la Rosa nos ha ofrecido enviar muy pronto la segunda parte de “las memorias del último soldado de la Independencia”. Quiere, nos dice, corregirla cuidadosamente y conocer si su obra merece o no la aceptación del público”.

Inequívocamente el texto periodístico de El Heraldo, que se publicó 24 años antes de la segunda edición de la obra, identifica al coronel Juan de la Rosa como el único autor de las Memorias del último soldado de la Independencia, a tiempo de informar que éste había ofrecido enviar una segunda parte a los redactores de ese periódico (por entonces Avelino Aguirre y Telésforo Aguirre). Mayor diafanidad, imposible.

En conclusión, las Memorias del último soldado de la Independencia no se pueden interpretar únicamente como una novela melodramática, producto de una febril imaginación; sino que su propio contenido, confrontado con develadores documentos descubiertos últimamente, permite que se las consideren como un narración histórica testimonial, escrita a lo largo de muchos años por un protagonista y testigo presencial de los hechos; por lo que es totalmente lícito opinar que Juan de la Rosa no sólo existió realmente, sino que escribió y publicó en vida su propia experiencia sobre los sucesos que vivió Cochabamba entre los años 1810 y 1812.

Contes de la mine

La editorial parisina L’ Harmattan, en su colección dedicada a la literatura latinoamericana, acaba de publicar "Cuentos de la mina", cuyo cuidado y traducción estuvo a cargo de Émilie Beaudet, una francesa que conoce como pocas la realidad boliviana.

Émilie Beaudet, quien hace años escribió una tesis de licenciatura sobre Domitila Barrios de Chungara, tradujo también una serie de crónicas mineras de Víctor Montoya, que primero aparecieron en su blog "Montagnes d’ ici et d’ ailleurs" y posteriormente en varias publicaciones francesas.

"Cuentos de la mina", cuya versión en español se editó desde el año 2000 en Suecia, España y México, fue reeditada en Bolivia el año 2011 por Fe de Erratas y el grupo editorial Kipus de Cochabamba. Se trata de un libro que, debido al estilo depurado del autor y a las modernas técnicas literarias insertadas en cada uno de los cuentos, mereció comentarios favorablemente tanto dentro como fuera del país.

Víctor Montoya es, sin lugar a dudas, uno de los pocos escritores bolivianos traducidos a la lengua de Balzac y Víctor Hugo, y es el primer escritor de cuentos mineros cuya obra está siendo traducida y difundida en otros idiomas. No en vano dio a conocer que dentro de poco estará en circulación la edición alemana de "Cuentos de la mina".

El libro, de 224 páginas ilustradas con fotografías de Jean-Claude Wicky, Stanislas de Lafon y otros, resalta en la portada la imagen impactante del Tío de la mina, concebida por el pintor español M. L. Acosta, y en la contraportada se lee: "Este libro, compuesto por ’Cuentos de la mina’ y ’Conversaciones con el Tío’, refleja una de las vertientes más ricas de la narrativa de Víctor Montoya, quien rescata y recrea el mundo mágico y mítico de las minas y los mineros de Bolivia, a partir de dos criterios fundamentales: primero, alejándose conscientemente del llamado ’realismo social’ y, segundo, sumergiéndose en el subconsciente colectivo de los habitantes del altiplano, en un intento por atrapar a las fuerzas telúricas de la cosmovisión andina, donde se genera un mestizaje cultural y supervive el sincretismo religioso a través de un personaje ambivalente como es el Tío; una deidad del bien y del mal que habita en el vientre de las montañas y a quien los mineros, en un acto de sumisa veneración, le temen y le rinden pleitesía ofrendándole hojas de coca, cigarrillos y aguardiente".

"Contes de la mine - Conversations avec le Tio" (2012), incluye, además de una extensa biografía del autor, el prólogo del asturiano Benigno Delmiro Coto y la excelente traducción de Émilie Beaudet, quien al recibir los primeros ejemplares sintió una honda satisfacción, porque estaba consciente de que este libro, en el cual puso todo su empeño y cariño, es en parte su criatura del alma, no sólo porque a partir de ahora circulará entre los lectores galos, sino también porque es un libro que le acercó como nunca al mundo mágico y secreto del Tío, a quien aprendió a ch’allarle a la usanza de los mineros bolivianos, con la esperanza de que "Contes de la mine - Conversations avec le Tio", que lleva la impronta de su traducción, sea bien recibido por los lectores y la crítica literaria.

Víctor Montoya, que vivió desde su infancia en los centros mineros del norte de Potosí, mostró su satisfacción ante la traducción de su obra que, debido a razones ajenas a su voluntad, es mucho más leída fuera que dentro de Bolivia. Manifestó también que la difusión de su obra literaria en otros continentes y otras lenguas servirá para despertar el interés de los editores por otros autores nacionales que, tanto en verso como en prosa, tienen libros que merecen ser traducidos y difundidos a nivel internacional.

Cuentos de la mina: La traducción

Siempre hay que estar orgulloso de su trabajo. No soberbio, solamente orgulloso. Pues la concretización de un proyecto de larga duración merece que uno se felicite y comparta su alegría por haberlo llevado a cabo, a pesar de todo.

Hace algunos años, precisamente en mayo del 2009, recuerdo que recibí un correo con un texto sobre Guillermo Lora, líder político que acababa de fallecer. En ese correo, una sola frase: "gracias por difundir". Firmado: Víctor Montoya. Me dije: es increíble, este nombre reconozco. Sí, Víctor Montoya, autor de los Cuentos de la mina, libro que había encontrado en la avenida Heroínas, en Cochabamba, mientras buscaba libros sobre las minas en el marco de mis investigaciones universitarias.

Montoya, un descubrimiento, y todo un mundo con el que me iba familiarizando, que me era cada vez más próximo. Una obra original, nueva, diferente, perturbadora y mágica a la vez. En aquella época, al recibir ese correo, me dije: es imposible, no es él, debo estar equivocada. ¿Por qué se dirige a mí? ¡No soy nadie! Le contesté, preguntándole, de puntillas y con guantes blancos y de seda: ¿es realmente usted, el "verdadero" Víctor Montoya? Me contestó en un largo correo que sí, era él, que había visto mi blog sobre Bolivia, que había entendido que yo me interesaba por las minas y los mineros, que por eso me había enviado ese texto. Salté sobre mi silla, o me caí, ya no me acuerdo. ¡Era alucinante, una suerte, un regalo del destino! Le pedí permiso para traducir ese primer texto sobre Guillermo Lora. Aceptó.

Fue el inicio de una gran colaboración y el nacimiento de una amistad. Víctor Montoya me confió sus "Crónicas mineras", una tras otra, y las traduje. Descubrí, me enriquecí, me impregné de esa cultura que él conoce tanto. Poco a poco, fui aprendiendo un poco más acerca del personaje, su historia, sus compromisos, su exilio a Suecia, su Bolivia. Los intercambios por email se hicieron más largos, él me apoyó y me ayudó en mis investigaciones universitarias, nos hicimos amigos. Es una alegría trabajar con Víctor, está siempre a la escucha.

Y un día vino la propuesta, la de traducir los famosos Cuentos de la mina, los que se encontraban en mi biblioteca, a los que tenía el proyecto de dedicar un capítulo de mi tesina, a los que ya casi me sabía de memoria, que había leído y releído. ¡Qué pregunta! Evidentemente, dije un gran sí, sin condiciones, sí nomás, casi sin pensarlo. Me tomaría el tiempo necesario, pero me comprometí, con los ojos cerrados, porque sabía que había mucho por ganar.

Cuentos de la mina… En esa mina me adentré, viví en sus entrañas, día tras día, avancé, en la oscuridad. La Virgen del Socavón, el Chiru Chiru, la Chinasupay y, claro está, el Tío, todos esos personajes me acompañaron en mi trabajo. A veces, hasta sentí la presencia del Tío. Entonces me esmeré. Quería tratarlo bien, para que estuviera satisfecho con mis palabras. La parte más difícil, más laboriosa, comenzó al final de la traducción, con la relectura. Mejor dicho, las relecturas, decenas, ni siquiera puedo contarlas. ¡Cuántos ojos se posaron en esas páginas! ¡Casi se puede hablar de una solidaridad ocular! Leímos, releímos, desmenuzamos, analizamos, corregimos, remplazamos. Un verdadero trabajo de artesanos, pues ante todo no había que deformar el texto de Víctor, ¡que es orfebrería!

Por fin, lo enviamos a varios editores. Nos contactaron muy rápidamente. Pero cayó la sentencia: querían otros textos más. Me lancé otra vez en algunas horas febriles de traducción acelerada, pues entonces tenía la presión del tiempo, porque estaban esperando mi trabajo. Fueron las "Conversaciones con el Tío", esa serie de textos en los cuales Víctor Montoya habla de literatura con su divinidad favorita. Un regalo para los ojos, a veces un rompecabezas, siempre una recreación, un nuevo desafío en cada juego de palabras, en cada expresión. Nunca me pesó este trabajo; al contrario, me divertí.

Sin embargo, lo confieso, ya era tiempo de que todo eso se termine, que el libro vuele con sus propias alas. Sentía que había llegado el momento, que había concluido la gestación. Al Tío, al final, ya no lo podía ver ni en pintura. Sobredosis. Cuidado, es una metáfora… No quisiera enojarme con el que, de cierta manera, es también mi protector y el que supervisó mi trabajo. Desde entonces, cuando escribo, siento a menudo su presencia a mi espalda, su mirada de fuego y su soplo detrás de mí, esa ironía que él tiene a veces, esa capacidad solapada de hacerme dudar del contenido y del estilo de lo que estoy escribiendo. ¿Quién dijo que las divinidades ancestrales eran incultas?

Al cabo de este trabajo, tres años después de ese lindo encuentro con mi amigo Víctor Montoya, les anuncio con orgullo la publicación de nuestro libro, "Contes de la mine".

sábado, 24 de marzo de 2012

‘Yo que tú’ es la nueva novela para niños de Santillana

Yo que tú es el título del libro que Claudia Adriázola presentará mañana en La Paz. La autora busca fomentar la empatía en los niños con una historia de aventuras sin caer en la prédica ni en la moraleja obvia.

“Para mí es muy importante que los pequeños aprendan a colocarse en el lugar del otro. Pero eso no lo voy a lograr aleccionando al lector. Es mucho más eficaz transmitir el mensaje mediante la diversión”, asegura la escritora.

Yo que tú se presentará mañana a las 17.00 en el hotel Camino Real (Av. Ballivián, c. 10 de Calacoto). El texto cuenta la historia de Nicolás Ríos, un niño de 11 años que, como otros, le gusta jugar fútbol, ver tele y comer golosinas. Pero Nico es un poquito más egoísta que el resto.

Un día conoce a un extraño personaje que le ofrece un artefacto que le permitirá echar una miradita al interior de las personas y, así, conocerlas mejor. El origen de la obra, cuenta su autora, está en los textos escolares de Santillana en los que ella colaboró. “Enseñamos valores mediante relatos cómicos o de aventuras”, recuerda.

Eso le despertó la inquietud de escribir un texto que ayudara a sus lectores a asimilar el concepto de empatía y que atrapara a los niños con la lectura. “La literatura infantil es fundamental, ya que hace que los niños obtengan el hábito de leer”, afirma.

Adriázola necesitó de siete meses para completar la novela, a la que considera un reto, ya que “tienen que capturar la atención del lector que está rodeado de televisión y videojuegos”, puntualizó.

Historias de Oruro Nº 14 rememora interesantes hechos de antaño

La revista "Historias de Oruro" en su edición número 14 rememora interesantes hechos históricos de nuestra tierra, con artículos relacionados al folklore, el deporte y otros. La presentación se realizó anoche en el café Concert del Santuario del Socavón.

"Historias de Oruro" se ha constituido en un documento de registro histórico y de valía consecuente desde su primera edición a la actual, pretendiendo siempre generar una reflexión acerca del ser orureño, desde el pasado de las instituciones y de la experiencia, así como el ejemplo de sus ciudadanos meritorios y personajes.

Entre los artículos que presenta la nueva edición se encuentran: "La vida de don Atiliano Zelaya", uno de los cerrajeros más conocidos en los años 50 y 60, una narración con anécdotas, hechos curiosos y con la particularidad de cómo se caracterizaba al abrir las cajas fuertes del antiguo Banco Central de Bolivia, o candados antiguos.

En la presentación, el director de la revista, Fabrizio Cazorla Murillo, enfatizó la importancia del documento como un aporte a la recuperación de nuestra historia y mencionó artículos sobresalientes de la presente edición.

El trabajo denominado "Ser soldado en los años 30", que se enmarca en cómo se presentaba el deber cívico, la obligatoriedad y sobre todo las características de ser conscripto en ese tiempo. El artículo está acompañado de varias ilustraciones.

En el ámbito del deporte se cuenta con un documento sobre los antecesores del equipo de fútbol San José, denominado: "Los húngaros bolivianos", trabajo de investigación dándonos a conocer el porqué del nombre de los húngaros, de cómo nace y se inscriben a la liga interdepartamental en primera instancia. Para próximas ediciones se anuncia la continuidad de ésta apasionante historia.

En el ámbito folklórico está el artículo relacionado a los cargamentos en el Carnaval de Oruro, describiendo cómo a principios de siglo se producía la entrada de las acémilas con todas las joyas de plata, los cargamentos en los motorizados.

Otro interesante documento que se encuentra en esta edición menciona al orureño "N. Menacho", como la primera víctima de la Guerra del Pacífico, que en la defensa de Calama estuvo con Eduardo Avaroa y Ladislao Cabrera.

El Mundo de las Letras

Este volumen pretende ayudar a bachilleres que tienen dificultades para rendir un examen de ingreso a las casas de enseñanza superior, llámese universidades, instituciones militares e institutos normales superiores, pues es muy común observar que cuando los estudiantes culminan los estudios secundarios se olvidan de las normas gramaticales del lenguaje escrito, los nombres de las obras y sus respectivos autores nacionales e internacionales. Por ello, este libro intenta ser un recordatorio de la ortografía, gramática y la literatura, temas que todos los postulantes a cursos superiores deben saber para rendir exámenes de ingreso sin ningún problema.

Además trata de ayudar a quienes necesitan conocer las normas o métodos indispensables para poder redactar con coherencia y claridad. De la misma manera proyecta ser texto de consulta para los profesores, particularmente de la asignatura de lenguaje.

Este volumen está divido en dos partes: a) Ortografía - gramática. b) Literatura.

La primera parte tiene como objetivo utilizar algunos aspectos ortográficos y gramaticales para que se ejercite el conocimiento del sistema de la lengua y se adquiera mayor habilidad para la comunicación escrita.

La segunda parte es la síntesis de la literatura clásica en todos sus períodos. Además de describir de manera detallada las diferentes figuras retóricas de la literatura, autores y obras más relevantes nacionales e internacionales.

En la presente edición se ha unido la ortografía, gramática y literatura para que el estudiante pueda manejarlo de manera íntegra.



FICHA TÉCNICA

Título: El Mundo de las Letras

Autor: Lic. Jhonny Acho Marca

Tamaño: 21 x 16 cm

Walker Paiva presentó el libro "Diccionario de Auditoría"

Luego de un arduo trabajo en el área de auditoría financiera, el autor Walker Paiva logra articular varios conceptos debidamente investigados, para favorecer la bibliografía de este rubro, con la obra "Diccionario de Auditoría". La presentación se realizó la mañana de ayer en el Consejo Universitario, en presencia de autoridades, docentes, estudiantes de la Universidad Técnica Oruro (UTO) e invitados especiales.

En el acto, el autor consideró varios conceptos; "las clases magistrales que se daban y se dan en nuestra universidad, son de suma valía en la formación de los profesionales, y pasa ahora a una nueva forma de dar las lecciones, en forma más metodológica, pero ante todas las cosas más analíticas y, con una participación que permita discutir cada uno de los módulos que está en la currícula estudiantil, me parece interesante", explicó el autor Walker Paiva.

"Todos los acápites mencionados trasuntan en el quehacer universitario, nos hace falta una serie de aspectos, pero lo que no debemos perder nunca de vista los docentes universitario, es la voluntad que debemos dar, el amor de enseñar, la calidad humana como se debe tratar y, fundamentalmente, el amor a nuestros universitarios, quienes serán el día de mañana nuevos profesionales o nuevos docentes", afirmó Paiva.

Por su parte el rector de la UTO, Rubén Medinaceli Ortiz, indicó: "Este tipo de actividades sin duda alguna enaltecen a nuestra universidad, la producción intelectual de docentes, de estudiantes, es siempre importante puesto que le dan sentido a lo que es una institución de académica".

La obra de Paiva, es un trabajo interesante que servirá como material bibliográfico, aporte ponderable desde todo punto de vista, puesto que elaborar un diccionario no es tarea fácil ya que se requiere de un dominio conceptual importante.

viernes, 23 de marzo de 2012

UNA OBRA DE RAFAEL PUENTE “RECUPERANDO LA MEMORIA”

Rafael Puente presentó el martes el libro “Recuperando la memoria” en el CEDIB.

Al finalizar el acto los invitados compartieron un vino de honor.


Tres títulos se estrenan en velada poética del Patiño

“La sed donde bebes”, de Mónica Velásquez; “Demo”, de Jessica Freudenthal y “La última es(cena), de Fernando Van den Wyngard se presentaron anoche en la velada poética organizada por el Centro Simón I. Patiño y Plural editores, en homenaje al Día Mundial de la Poesía que se celebró el miércoles pasado.

Además de la presentación de libros, hubo lectura de poemas con invitados como René Antezana, Melita del Carpio, Daniela Elías, Elena Ferrufino, Gabriel Iriarte, Juan Malebran, Juan MacLean, Ivette Mercado, Gustavo Munkel, Cecilia Ramos, Cecilia Romero y Vilma Tapia.

Sobre los estrenos

La obra presentada anoche es el quinto poemario de Velásquez en el que aborda la muerte y el nacimiento. ““Nos han dicho que la muerte y el nacer no deben mirarse a la cara” dice una parte de la presentación del poemario que lanza al lector a reflexionar en que quizás “ambas anden de la mano por nuestro día a día”.

Velásquez es doctora en literatura hispanoamericana por El Colegio de México. Ha publicado los poemarios “Tres nombres para un lugar” (1995), “Fronteras de doble filo” (1998), “El viento de los náufragos” (2005) e “Hija de Medea” (2008), obra ganadora del Premio Nacional de Poesía.

Sobre la obra de Freudenthal, Raul Zurita comenta que “Demo es un libro notable de una de las poetas más notables de la nueva poesía hispanoamericana” y añade que “ha sido capaz de reinventar la poesía concreta dándole una vitalidad, urgencia y, valga la redundancia, concreción que la ortodoxia del concretismo raramente alcanzó.

“Este libro hace emerger un territorio, el nombre de un país, Bolivia, y de paso nos muestra que en estos páramos sudamericanos una de las tareas más urgentes del poema es la de reinventarle al porvenir los significados de nuestras ciudades natales, de nuestras patrias tan a menudo saqueadas y traicionadas, pero en las que no obstante –y contra todo- persistimos en levantar algo que pudiese asemejarse a la felicidad”, señala.

Por su parte, Van den Wyngard, escritor chileno, presentó una trilogía de poemarios bajo un titulo común que agrupa textos escritos entre los años 2000 y 2010. Es su primera publicación en Bolivia de este autor que estudió filosofía en la Universidad Católica de Chile.

Entre sus publicaciones está el libro “Un nudo más en la red. Informe sobre la poíesis” (2010) y diferentes ensayos en sitios web, revistas y catálogos.

En poesía, ha publicado las plaquettes “El valle del murciélago” (1984) y “Lo inminente” (2005), ambas ediciones independientes de circulación restringida. Por largos años, hasta fines de la década de los noventa, dirigió los talleres Caja Negra. Cofundó y luego dirigió la revista El Espíritu de la Época (1984-1988) y fue editor de la colección de poesía “Serie Fin de Siglo” (1988).

"Los siete cuentos más cortos del mundo", una obra de Edwin Pacheco

En la salón de conferencias del Gobierno Autónomo Departamental, ayer se presentó el libro, "Los siete cuentos más cortos del mundo" escrito por Edwin Pacheco Salazar.

Pacheco, nació en Monteagudo, provincia Hernando Siles de Chuquisaca, estudió Derecho en la Universidad Mayor de San Francisco Xavier.

El primer cuento de este libro titula: "La llamita", La llamita lloró, sus lágrimas hicieron mar; expresado en siete palabras, cuya moraleja dice "A quien llora, no siempre se le da lo que quiere", representando el anhelo boliviano de recuperar el mar.

Y de esa forma dio lectura a los restantes seis cuentos, con sus respectivas moralejas, uno de ellos referido a los políticos titula "El politiquero" relata: "Un politiquero soñó ser Pinocho, despertó asustado; su moraleja ‘si sueñas decir la verdad siendo politiquero, en tus sueños dirás la verdad’".

Concluyendo la presentación del libro el autor manifestó: "No todo lo que imaginamos es lo mejor que pensamos".

Escribió los ensayos "Me lavo las manos", que es una parodia sobre la coyuntura del gobierno de Carlos Mesa Gisbert en el año 2002; "Si los chilenos nos devolvieran el mar, los bolivianos ¿aprenderíamos a nadar o a naufragar?" 2003, parodia sobre la política de recuperación marítima; "El Mutún no es una lata de atún" que se constituye en el análisis del potencial del Mutún; "Sucre cuna de libertad historia, arte y cultura", trabajo investigativo y "Potosí arte y cultura del mundo"

Escribió varios artículos en el Correo del sur, y también es el autor de "Oruro historia, arte y cultura", obra elaborada en 2011 sobre bustos y monumentos del departamento.

jueves, 22 de marzo de 2012

Autores alteños hacen libros en un laboratorio artesanal

Decididos a publicar sus obras a como dé lugar, jóvenes escritores alteños crearon un laboratorio literario en el que aprenden a diseñar páginas y portadas y a empastar sus propios libros.

“Éste es un espacio destinado a enseñar a fabricar libros artesanales porque publicar en una imprenta es muy caro”, señala Leticia Guarachi, responsable del Círculo Literario de El Alto cuyos miembros conforman este “laboratorio”. Ambas iniciativas parten del Centro de Poesía Albor “Arte y Culturas” que se creó hace ya 15 años.

Decenas de jóvenes alteños integrantes de este proyecto cerraron ayer, en el Ministerio de Culturas, las Jornadas por los Derechos Humanos y la Poesía, que tuvieron en los últimos días en diferentes espacios de esa urbe.

Según Guarachi, las ediciones artesanales prácticamente no requieren inversión porque muchos de los materiales que usan son reciclados: documentos y papelería en desuso, periódicos pasados, cartones y otros.

Cada escritor se encarga de confeccionar sus textos, por lo que el tiraje depende de cada uno. La mayoría saca entre 20 y 30 ejemplares de un poemario o libro de cuentos, y luego lo venden en cinco o diez bolivianos, con el plus de que cada portada tiene un diseño único y exclusivo.

Pero como el fin no es lucrar, la mayoría regala sus trabajos a amigos y familiares y no pocos mandan algunos ejemplares a editoriales locales con la esperanza de despertar su interés.

No obstante Willy Flores, director del Centro Albor, afirma que precisamente uno de los motivos que impulsó a crear el laboratorio literario es el casi imposible acceso de autores desconocidos y noveles a las editoriales.

Pero el mayor óbice es definitivamente el económico. “Publicar mil ejemplares de un libro cuesta unos 500 dólares, y un joven autor que vive en El Alto, que tiene un ingreso promedio de diez bolivianos por día, tendría que trabajar tres años sólo para editar su obra”, sostiene Flores.

“En El Alto hay poca producción literaria, pero tenemos a muchos escritores jóvenes. Lo que hacemos, aparte de producir libros artesanales, es buscar apoyo para que entidades públicas o privadas ayuden a publicar los mejores trabajos”, cuenta María Elena Cárdenas, coordinadora de Albor. Gracias a este afán, se logró la publicación de Sariri Jutiri y Pluma de plata, dos textos de autoría colectiva.

Un espacio literario

Como el principal impulso es el amor por la literatura, Albor y el Círculo Literario también organizan y participan de varias otras actividades como charlas, sesiones de lectura y talleres de escritura y edición.

“Impulsamos a los jóvenes a escribir en diferentes géneros y sobre diferentes temáticas, y demostrar así que en El Alto no sólo somos bloqueadores”, comenta Guarachi y cuenta que el Círculo Literario fue creado el año pasado con 40 socios y hoy tiene más de 80.

Este grupo de jóvenes también organiza talleres de escritura y lectura de poesía en colegios de al menos 15 distritos de El Alto.

Invitado a explicar los orígenes de estos proyectos, Flores recuerda que en 1997, cuando visitaba los primeros colegios de El Alto en busca de difundir la lectura y la creación literaria, los niños y jóvenes no estaban interesados.

“Pensaban que era muy aburrido, pero ahora cuando realizamos nuestros festivales de poesía participan más de 4.000 niños de toda la ciudad”, cuenta orgulloso.

Poesía y derechos humanos
Con el fin de celebrar el Día Mundial de la Poesía, que se recordó ayer, el Centro de Poesía Albor organizó, junto a la Defensoría del Pueblo y el Viceministerio de Descolonización, las Jornadas por los Derechos Humanos y la Poesía.

Se trató de una serie de coloquios y seminarios, efectuados durante una semana en El Alto, donde varios escritores y hablan de la poesía, literatura y su relación con los derechos humanos. También se prevén ferias educativas, tertulias poéticas y espacios de análisis. El objetivo es simple pero profundo: “difundir los derechos humanos a través de la poesía”, dice María Elena Cárdenas.

El Centro Patiño alista una velada poética y la presentación de 3 obras

Como cada año y en el marco de la celebración del Día Internacional de la Poesía, el Centro Simón I. Patiño organiza para esta noche una velada poética que girará en torno a los cuatro elementos -tierra, aire, fuego y agua- considerados fundamentales no sólo para crear vida, sino también para inspirar las grandes obras de la poesía universal.

Como en versiones anteriores, la actividad fue coordinada con Plural Editores que presentará las nuevas obras de los poetas bolivianos Mónica Velásquez, Fernando van de Wyngrad y Jessica Freudhental

El Centro Patiño ha preparado un espacio en los jardines del Palacio Portales, con una copa de vino, al calor de antorchas y con el sonido de fondo del agua que cae, en medio de un ambiente otoñal.

Los invitados a participar son René Antezana (poeta), Melita del Carpio (escritora y actriz), Daniela Elías (actríz), Elena Ferrufino (crítica literaria), Gabriel Iriarte (narrador), Juan Malebran (poeta), Juan Cristóbal Mac Lean (poeta), Ivette Mercado (actriz), Gustavo Munckel Alfaro (escritor), Cecilia Ramos (poetisa), Cecilia Romero (escritora) y Vilma Tapia (poetisa). Todos ellos ofrecerán la lectura de poemas en los que se resalte uno de los cuatro elementos esenciales en el planeta.

La velada está prevista a partir de las 19:00 y el público tendrá a su disposición el catálogo de poesía de Plural con 30 por ciento de descuento.

Presentaron el libro Medios a la Vista 2

La Fundación UNIR Bolivia, mediante el Observatorio Nacional de Medios (Inodem), presentó
anoche el libro “Medios a la Vista 2, análisis sobre el derecho a la información y la comunicación y el periodismo de Bolivia 2009 - 2011”.
Este es el segundo material que se produce sobre el derecho, calidad, condiciones de trabajo, desempeño de los periodistas y la evolución del campo mediático a la información y comunicación.
El libro se encuentra dividido en cinco partes, sobre el Onadem en seis años de recorrido, el derecho a la información norte y desafío, las coberturas periodísticas y perfiles de calidad, el gremio periodístico y sus facetas de desempeño y, al final, la dinámica política y campo mediático.
Este trabajo recopila investigaciones de trabajos seleccionados donde se hace análisis y opinión del derecho a la información y comunicación.
“Lo que señala el libro en la primera parte es el avance del derecho y lo que ha sucedido en los últimos años es la aprobación de normas de menor jerarquía a la Constitución que de algún modo vulneran el derecho a la información y comunicación, estamos hablando para comenzar de la Ley de Lucha contra el Racismo y toda forma de Discriminación”, manifestó Bernardo Poma, responsable metodológico operativo de Onadem.
Dijo que se hace una observación a la Ley del Régimen Electoral en relación al derecho a la información, y que están los pronunciamientos sobre estas normas.

En Oruro organizan la Cuarta Feria Nacional del Libro Infantil y Juvenil

El Comité Departamental de Literatura Infantil y Juvenil de Oruro (Codelijo), organiza la Cuarta Feria del Libro denominada "Un libro, un niño… una sonrisa", que entre el 13 y 14 de abril se desarrollará en ambientes del Kínder "Alemán".

El objetivo de ésta actividad es difundir y promocionar en todos los ámbitos la literatura infantil y juvenil, y además de establecer un espacio que permita el contacto directo de los autores con los niños, jóvenes y adultos que gustan del hábito de la lectura.

El secretario general del Codelijo, Javier Tarqui, informó que asimismo se pretende incentivar en los niños y jóvenes el disfrute y beneficio autónomo de la lectura como forma de comunicación, fuente de enriquecimiento cultural y goce literario.

También se pretende crear lazos de hermandad entre escritores, promotores de lectura y gestores de literatura infantil y juvenil.

Javier Tarqui, dijo que ya desde hace un mes varios autores nacionales manifestaron su intención de participar de la feria, habiendo confirmado su asistencia al menos 15 escritores de reconocida trayectoria.

miércoles, 21 de marzo de 2012

Día Internacional de la poesía Los poetas también tienen sus ídolos

Hoy se celebra el Día Internacional de la Poesía, y en Santa Cruz, los poetas no están exentos de la fecha. Cuatro poetas cruceños, señalan a los argentinos Jorge Luis Borges y Alejandra Pizarnik, a los uruguayos Mario Benedetti y Oliverio Girondo, a los bolivianos Yolanda Bedregal y Eduardo Mitre, e incluso al cantante cubano, Silvio Rodríguez, entre otros, como sus referentes y a quienes homenajearían en una fecha como esta.

Silvio como poeta. "Mi primer deslumbramiento verbal me sucedió con ese trovador imprescindible y mortalmente adictivo que es el cubano Silvio Rodríguez", sorprende Óscar “Puky” Gutiérrez. "Debo saber más de 70 canciones suyas. El siguiente fue el poeta uruguayo Mario Benedetti. Después me llegaron Girondo, Borges", añade el autor de Sobrevuelo 2.0.

"Juro que hacer poesía no fue una elección personal. No es que un día desperté y dije: “Voy a ser poeta”. No, eso es imposible. La poesía es algo que te sucede, incluso a pesar tuyo", explica.

Poesía con compromiso. En tanto, el periodista Alfredo Rodríguez, coautor del poemario “Tres al Hilo” destaca el valor social de la poesía. "Uno importante es el poeta ruso Yevgeni Yevtushenko, que tiene una poesía muy comprometida y muy cercana a Latinoamérica. Estuvo en América y, particularmente en Bolivia, en la década de los '70. Ha escrito de una manera realista sus vivencias en Latinoamérica y nuestros problemas sociales. Cómo transmite sus percepciones, eso me gusta mucho", argumenta.

"La poesía es la manera más realista, más fidedigna de expresar el espíritu, las cosas que sentimos, esa poesía que no se limita a métrica, verso libre, la poesía social, urbana, tiene que ser una poesía que traiga contenido, preguntas, vicisitudes. Esa es la poesía que me interesa", agrega.

Los versos de Neruda. "En el transcurso de mi madurez poética mi principal influencia fue Pablo Neruda definitivamente", asegura Pablo Carbone, autor de Embriaguez Nocturna. "Fue el primer acercamiento poético que tuve por la sencillez de su poesía y la variedad a lo largo de toda su obra.

Carbone cuenta que posteriormente empezó a leer poesía de Borges, los poetas malditos, como François Baudelaire, y luego descubrió poesía latinoamericana como la de Oliverio Girondo y Vicente Huidobro, o boliviana, especialmente la de Eduardo Mitre.

Voz femenina. Claudia Vaca se inclina por las poetas de su género. "Una de mis favoritas es Alejandra Pizarnik, por la vida dura que tuvo y cómo logro desahogarse, recuperarse y reconstruirse a través de las palabras de esa manera tan maravillosa como lo ha hecho. Me encanta Juana Inés de la Cruz, por la fuerza que tuvo al decir muchas verdades. La época que ella vivió (barroca) fue dura para la mujer, y con su valentía y elegancia logró decir muchas cosas sin perder un estilo poético profundo", señala la autora del poemario Versos de Agua, que también completó su podio de poetas favoritos con la cochabambina Yolanda Bedregal.

Celebraciones en el mundo. El Día Mundial de la Poesía es una actividad promovida por la Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura). Coincide con el equinoccio de primavera en el hemisferio norte y el de otoño, en el hemisferio sur.

Se lo creó para fortalecer la cultura en nuestro planeta y con ese pretexto se realizan diferentes actividades en diversas ciudades del mundo como ser París, Ámsterdam, Berlín y Bogotá.

Celebran Día Mundial de la Poesía

El Día Mundial de la Poesía (21 de marzo) será celebrado por la asociación de escritores PEN Bolivia, el viernes 23 de marzo a las 19.00 horas, en el Centro Boliviano Americano (C. 25 de Mayo No. 365). Participarán con declamaciones escritores locales y actuará la pianista Teresa Laredo. El ingreso es libre.

martes, 20 de marzo de 2012

Noche de versos en el día de la poesía

El Centro de Poesía Albor junto a otras instituciones organiza una serie de actividades por el 21 de marzo.

En el marco de la celebración del Día Mundial de la Poesía, mañana 21, a las 09.00, en el hall del Ministerio de Culturas habrá un Coloquio poético en el que participarán los poetas Juan Carlos Orihuela, Jaime Nisthauz, Jéssica Freundental y Clemente Mamani (poeta aymara). Por la noche, a las 19.00, se llevará a cabo un recital poético en el Teatro Municipal Raúl Salmón de la Barra, en la ciudad de El Alto.
De acuerdo con Willy Flores, del Centro de Poesía Albor Arte y Cultura, desde el pasado domingo comenzó la celebración por el Día Mundial de la Poesía con la realización de la octava jornada por los Derechos Humanos y la Poesía. Esta actividad, que contempla varias actividades, cuenta con el apoyo de la Fundación Albor de El Alto, el Ministerio de Culturas, el Defensor del Pueblo y la Embajada de Alemania en Bolivia.
Flores añadió que desde 2001 festejan el Día de la Poesía con diversas actividades, cuya temática es la de los derechos humanos a partir del año 2008.
Agenda. En la ciudad de El Alto, la celebración arrancó el domingo con una feria educativa en la zona 16 de Julio, y anoche se realizó una Tertulia con poetas bolivianos y alemanes en ambientes de Albor, en la calle 6 de la zona Villa Dolores.
Para hoy, a las 19.00, está programado un Coloquio poético en el Teatro de Cámara de la Alcaldía quemada que contará con la participación de poetas como Humberto Quino, Víctor Montoya (poeta sueco-boliviano), Jaime Nisthauz, Marcela Gutiérrez, Ángel Suaznábar, ganador del Premio Nacional de Poesía “Yolanda Bedregal”, Bonifacio Mamani (de El Alto) y Lucio Revollo.

PEN BOLIVIA homenajea a los poetas encarcelados y asesinados. En Cochabamba, Pen Bolivia, asociación mundial de escritores que celebra desde hace 10 años el Día Mundial de la Poesía, hará un homenaje a poetas, escritores y periodistas que están encarcelados y a los que fueron asesinados en diferentes partes del mundo por decir su voz en libertad. La cita es el 23 de marzo, a las 19.00, en el Centro Boliviano Americano (CBA).

La Fundación Pachamama reabre su biblioteca en Sucre

La Fundación Pachamama, una de las instituciones culturales más importantes de Sucre, retomará sus actividades mañana con la reapertura de su biblioteca y el lanzamiento de un catálogo virtual que entrará en funcionamiento próximamente.

Según anunció Jaime Loayza, su fundador y gestor principal, la biblioteca de la fundación funcionará bajo el mecanismo de “estantería abierta” y sus servicios serán gratuitos.

Loayza informó que la fundación se encuentra trabajando en la elaboración de un catálogo virtual, a través del cual se podrá acceder tanto a su colección bibliográfica compuesta por más 200 mil ejemplares donados por el pueblo catalán, como a su colección hemerográfica integrada por diarios de todo el país.

La fundación, cuyo objetivo es la promoción de la lectura entre niños, jóvenes y adultos de la ciudad blanca, atravesó varias dificultades logísticas y de financiamiento que incluso provocaron en 2010 el anuncio de su cierre definitivo, algo que se impidió gracias a varias gestiones privadas, las mismas que posibilitarán además la organización. para abril, de una feria del libro.

a editorial El Cuervo presenta ‘Click’ en la Cinemateca Boliviana

“La novela trata sobre un profesor de literatura que da clases en un colegio. Un día de calor está entrando al establecimiento a hacer algo decisivo y definitivo. Toda la novela está desarrollada en una hora”, dice Fernando Barrientos, director de la editorial El Cuervo, para describir a grandes rasgos el argumento de la novela de Christian Vera, Click.

En la contratapa se lee una advertencia: “El consumo repetido y desmedido de esta ficción puede provocar alucinaciones y delirios paranoicos”, un guiño para captar la atención de potenciales lectores.

Click es la primera novela de Vera, quien ganó hace cuatro años el Premio Nacional de Poesía Yolanda Bedregal con el libro Ciudad Trilce. También es la primera obra que El Cuervo presentará este año, y lo hará en la sala Luis Bazoberry de la Cinemateca Boliviana, el miércoles 21 a las 19.30.

La revista Colectivo 2 presenta su 5° número

Este viernes 23 de marzo, a las 19.00, se realizará la presentación del quinto número de la revista Colectivo 2, cuyo tema es “Conocer con el cuerpo”. El acto se llevará a cabo en la sala Luis Bazoberry de la Cinemateca, y comentarán los textos Ximena Soruco y Juan Arbona.

El Colectivo es un grupo que surge a partir de la iniciativa de algunos estudiantes de Sociología que se juntaron para debatir, charlar y reflexionar sobre distintos temas. El grupo se consolidó con la investigación efectuada a propósito de la muestra de arte “Principio Potosí”, que se exhibió en España y Alemania en 2010, y con la creación de la revista Colectivo 2 en 2009.

Luego de las reflexiones sobre el crecimiento y transformación del cuerpo en el cuarto número, Colectivo 2, en su quinta entrega, rinde un homenaje al lurawi, vocablo aymara que significa “el hacer”. “Nuestro trabajo como obrerxs, agricultorxs, tejedorxs y recicladorxs de un espacio urbano, en esta ocasión, nos permite presentar una producción intelectual habiendo conocido desde el cuerpo”, indica la presentación de la revista.

A manera de manifiesto, el grupo afirma que en tanto la sociología siga siendo una ciencia colonial del poder, no habrá mejor ciencia que la torpeza de su irreverente creatividad, “ni mejor política que la de contribuir día a día a la belleza ch’ixi y anarquista de la vida”.

Presentación del libro “Corazón mágico”

Con el apoyo del Comité Departamental de Clubes de Libro, en el salón principal del Club Social, la escritora Irma Magnani Valdéz de Vía presentó su libro “Corazón Mágico”. El contenido literario fue compartido con los amigos y familiares, quienes acompañaron a la autora con un brindis al concluir la ceremonia.

Presentan “Recuperando la memoria II” de Rafael Puente

En ocasión de las actividades que conmemoran el 40 aniversario del Centro de Documentación e Información Bolivia (Cedib), el tomo dos del libro “Recuperando la memoria. Una historia crítica de Bolivia”, de Rafael Puente Calvo, será presentado hoy. El acto tendrá lugar, a las 19.00 horas, en la señalada entidad (C. Calama No. 255), donde la publicación será comentada por su autor y el escritor Ramón Rocha Monroy.

“Recuperando la memoria”, dicen sus esditores, es un libro de historia, pero de historia crítica. No es una investigación de fuentes primarias, sino una reinterpretación de lo que muchos otros y otras han investigado. El autor no es un historiador académico, sino un educador popular, y es a partir de muchos años de hacer educación popular que ha llegado a la convicción de que “la historia puede ser el mejor instrumento para provocar el despertar de las conciencias”. El volumen empieza con la crisis que se desata tras la Guerra del Chaco y que da lugar a lo que podemos llamar la historia moderna de Bolivia, es decir los otros dos grandes bloques históricos, el de la Revolución de 1952 y el neoliberal; y termina con la crisis de este último modelo y la apertura al proceso de cambio que se inicia con el acceso a la presidencia de Evo Morales, a fines de 2005. Su principal característica es el intento de recuperar la memoria, “que no por casualidad se ha mantenido oculta, de los sujetos más profundos de nuestra historia: los pueblos indígenas u originarios -de Tierras Altas y de Tierras Bajas-, los explotados y oprimidos, y en lo posible las mujeres”.

Celebran Día Mundial de la Poesía

El Día Mundial de la Poesía (21 de marzo) será celebrado por la asociación de escritores PEN Bolivia, el viernes 23 de marzo a las 19.00 horas, en el Centro Boliviano Americano (C. 25 de Mayo No. 365). Participarán con declamaciones escritores locales y actuará la pianista Teresa Laredo. El ingreso es libre.

lunes, 19 de marzo de 2012

Flavia Company publica "Volver antes que ir", el viaje hecho poesía

La argentina Flavia Company, afincada en Barcelona, maestra en el cuento y la novela, es una malabarista del lenguaje que nunca había publicado poesía. Ahora lo hace con "Volver antes que ir", una obra fruto de la catarsis que le provocó leer el diario que su madre escribió de niña, en su primer viaje a España.

Un libro con un solo poema de 1.117 versos que ha sido editado muy cuidadosamente por la colección de poesía Fuente del Abanico, de Eugenio Cano editor, y cuya escritura ha supuesto para la autora haberse "acercado al borde del gran planeta que es la literatura", según explica a Efe.

Flavia Company (Buenos Aires, 1963), autora del libro de cuentos "Con la soga al cuello" y de las novelas "Dame placer" o "La isla de la última verdad", un éxito en Alemania, Italia, y Estados Unidos, encontró el diario de su madre cuando esta murió en 1989.

Su madre lo había escrito a los doce años cuando viajaba en barco desde Buenos Aires a Barcelona con sus padres para visitar el pueblo de su abuelo, Bellcaire d'Urgell.

Pero, en aquel momento, la autora no pudo leerlo y fue necesario que pasaran veinte años y toda una serie de acontecimientos para que Flavia Company decidiese enfrentarse a él en un viaje de vuelta a Argentina para encontrarse con sus orígenes.

Todo ello lo relata Company en el prólogo del libro, que titula "Secreto", donde desnuda la palabra y la verdad que da razón de ser a este poemario, que juega con los límites del lenguaje y cuya hipótesis es que la emigración se hereda.

Flavia Company emigró a Cataluña con su familia cuando tenía nueve años, y ella, que ya había escrito en su primera novela, "Dame placer", que "a las cosas y a los lugares no se puede volver ni siquiera volviendo", comprendió durante ese viaje de vuelta a Argentina, y tras el encuentro con todo el mundo de su infancia, que la emigración es "algo hereditario".

"Que los lugares de los que se parte influyen tanto en la identidad como los lugares a los que se arriba -si bien la realidad demuestra que jamás se acaba de partir y nunca se termina de llegar-. Y que, en efecto, no hay forma de volver", escribe.

Pero "Volver antes que ir" no es un argumentario biográfico sobre la emigración, el viaje, el destierro o el desarraigo, sino un viaje en imágenes que reproducen en la imaginación y la retina del lector justamente aquello que es el sentimiento que supone el viaje, y, además, ¿quién no es emigrante en ese mundo?, se pregunta la autora.

Un hilo narrativo con un eje central en un poema largo lleno de música de fondo, escrito en argentino, algo que hace por primera vez Flavia Company, quien acompaña al lector como si éste fuera en parapente (deporte que ella práctica) por los abismos de la vida y sus interrogantes.

Este poema va intercalándose, de cuando en cuando, con textos, algunos de ellos de la Wikipedia, o con piezas en prosa de la propia autora que contextualizan o dan claves para la lectura del mismo.

"El contexto también es literatura. Son las palabras que preceden a otras palabras", subraya Company, quien cita también en el libro al filósofo Wittgenstein con su famoso "el límite de mi lenguaje es límite de mi mundo", una visión que le va como anillo al dedo a la escritora.

De Guido Molina Velásquez "Mis Poemas del Alma" un material dedicado al ser amado

El escritor Guido Molina Velásquez, ayer presentó un poemario dedicado a aquellos seres que aman, denominado "Mis Poemas del Alma", un material de 70 páginas aproximadamente, que resume en su contexto el sentimiento más hermoso que es el amor.

En este material se encuentran poemas como: Bandera en la Diversidad, un poema dedicado al civismo que tiene el ciudadano que entrega su vida en el colegio y la milicia, además de entregarse más allá de la exigencia de la sociedad.

O el poema "Mi poema del alma", jamás imaginé vida mía, que tan solo bailar frente a ti iluminarías mi corazón, para inspirar mis versos sobre ti, es que en realidad eres ¡mi poema del alma!, eres tan importante mi vida como las flores de mi jardín, rezan algunas de las estrofas de este poema dedicado a la santa patrona de los orureños, la Virgen del Socavón.

Esta pequeña antología, nos permite apreciar el sentir del autor, Guido Molina Velásquez, quien en las páginas de ese impreso desarrolla el sentido creativo de lo que es el amor, en su concepción más pura.

En la presentación de Molina, dedica sus versos a la madre, el padre, la Virgen de la Candelaria, Oruro, el amor, el recuerdo y otros diferentes tópicos desarrollados a través de la pluma creadora del escritor.

En sus versos Molina sólo describe aquello que muchas personas no pueden hacerlo, de los 33 poemas, uno de ellos es "Gracias Papá", donde detalla la experiencia de un niño con su padre, desde sus primeros pasos, en el colegio, y la dedicación que este tiene, con su hijo.

"Cansado de tanto esperar, ya agobiado en su pelo gris y en su lento caminar, se veía cuán grande era su esfuerzo, en su mirada tierna, veía su sabiduría, como queriendo expresar… ya he cumplido", es una de las estrofas de su poema dedicado al Día del Padre que se recuerda hoy.