viernes, 20 de julio de 2012

Siles entrega ‘Sí, el Mar’, el informe de su misión

“El título del libro es una afirmación positiva, optimista; me opongo a quienes ven como imposible conseguir la aspiración boliviana, me opongo a los ‘Nos’ que hemos recibido de parte de nuestros vecinos cuando hemos hecho formalmente una demanda de salida al mar”, dijo Siles Salinas ayer en una conversación con La Razón.

El libro está dividido en dos partes. La primera plantea el contexto histórico de la demanda marítima boliviana con “una mirada integracionista”, la segunda desclasifica los detalles de su gestión marcada por la propuesta de Bolivia presentada a Chile en 1987 en una reunión de cancilleres realizada en la capital uruguaya de Montevideo. Víctor Paz Estenssoro, quien por ese año gobernaba Bolivia, propuso a través del canciller Guillermo Bedregal acceder al Pacífico recuperando la negociación de la franja al norte de Arica que emergió en 1975 con el “abrazo de Charaña. El ejecutor de la propuesta sería Jorge Siles.

No obstante, en 1987 “había condiciones favorables”. En Chile se desarrollaba el último tramo de la dictadura de Augusto Pinochet sin oposición que le haga frente a la hora de resolver los problemas limítrofes que por entonces enfrentaba con sus vecinos.  

“Paz Estenssoro consideró que era un momento oportuno: Un régimen militar en el que no existía oposición ni Parlamento para que se iniciara nuevamente una revisión de las relaciones y que Chile adoptara una actitud más abierta en relación con Bolivia y así terminase el periodo militar con el arreglo previo de las tres fronteras, lo cual habría sido algo que habría dignificado el régimen de Pinochet tan combatido”, afirmó Siles.

Entre los aportes del libro, Siles revela que un sector de la Democracia Cristiana de Chile compartía esa visión de Paz Estenssoro, incluso con la percepción premonitoria de que “en democracia la demanda marítima sería un tema complejo de resolver”.

El libro cierra con una sección de apéndices donde se presentan documentos, parte de la correspondencia que se desarrolló en el período del llamado “enfoque fresco”, además de una exquisita presentación que hizo el autor en el Club de La Paz al cumplirse el centenario del Tratado de 1904.

“He tratado de ser objetivo, evitando conceptos hirientes hacia personas o países, manteniendo la serenidad pero sin renunciar a mi condición esencial de boliviano a quien se le encomendó una misión difícil”, anotó el autor del libro que se presenta a las 19.00 en el Círculo de la Unión.

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