LIBRO
Pudor (2005), de Santiago Roncagliolo.
Roncagliolo aprovecha la versatilidad de narrar una historia con seis protagonistas -uno de ellos un gato- y pasa de la comicidad a la pena profunda o a la reflexión filosófica de forma intermitente y fresca. Me encanta. Un abuelo demente, un padre apagado, una madre sexualmente curiosa, una hija púber confundida, un hijo pequeño que ve fantasmas y mata bichos, y un gato malcriado son las seis historias que se tocan sin conectarse mucho, y vemos las mentes egocéntricas de cada uno como un collage de intimidades.
PELÍCULA
El rey (2005), de James Marsh.
Con esta película descubrí lo importante del valor estético (del cine) casado con una historia que valga la pena. Un hijo (bastardo) encuentra al padre que nunca había conocido. Llega a él y le cambia la vida fatalmente.
DISCO
Atemahawke (2007), de Porter.
Este grupo mexicano de rock experimental (que ya no existe como grupo) fue la banda sonora de mi vida un verano. Espiral y Host of a ghost hablan de finales. Las canciones de este disco son melancólicas pero sonrientes.
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