T odavía no se la cree. En 2007 obtuvo su primer galardón a nivel infantil, pero este año el escritor samaipateño, César Herrera, envolvió con sus letras al jurado y se alzó con el I Premio Nacional de Literatura Juvenil Alfaguara.
Preferencias. “Coky” (como lo llaman en su pueblo), confesó que disfruta tanto de la literatura, que no le presta atención a la televisión, ni al chat, ni a las redes sociales, porque puede invertir "mejor" su tiempo escribiendo textos, que "pegado a una Tv, a un celular o a una computadora".
Eso no significa de que alguna vez prenda el televisor para ver el noticiario o ingrese a su cuenta de “Face” para actualizar su muro.
gustos. El también actor de teatro y pintor no cambia por nada a su natal Samaipata, porque en ella encuentra una paz única, que en la ciudad no puede palpar; además, para él la relación con la naturaleza es fantástica. Identifica una "energía especial" en su tierra, que atrapa a propios y extraños, y de la que se siente “embrujado” y cautivado.
En sus estantes abundan los libros, así como los 36 búhos de diferentes tamaños, y si de películas se trata le gusta la reciente "Cloud Atlas", así como "El señor de los anillos" y "El exorcista", pero la dirigida por William Friedkin. Se deleita con las interpretaciones de Halle Berry y Tom Hanks, y señala a Alfonso Cuarón como uno de los grandes directores latinos. "Pero me falta ver su reciente película "Gravedad", acota. Admira al mexicano Carlos Fuentes, a la chilena Isabel Allende, al colombiano Gabriel García Márquez y al peruano Mario Vargas Llosa, mientras que su obra favorita es "Aura".
de la obra. Su mayor inspiración para escribir "El día más triste de la soberana más bella" (con la que ganó el premio de Alfaguara), fue su abuela Petrona Banegas, a la que no le pudo dar el último adiós, porque estaba en México. "Es un homenaje a ella", puntualiza.
Mientras escribía la novela también escuchaba "Clocks", de Coldplay, una de sus bandas favoritas.
A los 11 años su vida dio un giro de 180 grados, porque tuvo que irse a vivir con su madre al país azteca y dejar todo en Bolivia. Estudió Psicología en la Universidad Metropolitana de Monterrey y después de siete años retornó al país, ahora vive solo y trabaja en Gestión Cultural del Centro de Investigación Arqueológica de Samaipata.
Política y más. No le agrada opinar sobre política, pero cree que el socialismo no tiene un buen futuro y necesita líderes comprometidos con el país, no con intereses personales. Reconoce que el presidente Evo Morales ha hecho buenas cosas, pero "quizás cometió errores para algunos círculos sociales".
Cree en Dios, pero no se persigna ante un altar, tampoco asiste a la misa los domingos y no reza ni el Padre Nuestro ni el rosario. No cree ni en el cielo ni en el infierno y no condena la unión entre personas del mismo sexo.
La música es su gran debilidad y los sábados son sagrados, porque los dedica a divertirse. Le gusta la música electrónica y se declara un bailarín de primera en la pista.
No juega fútbol, pero sale a caminar todos los días, a las 6:30, sin embargo, duerme poco, ya que se acuesta pasada la medianoche. Cocina comida mexicana y su especialidad son los tacos o los burritos.
A sus 37 años no cree en el matrimonio, pero sí en el amor. Subraya en que no está en sus planes dar el "sí, quiero", ante Dios.
No se detiene. Es autor de 11 piezas teatrales y seis obras, incluida la ganadora. Alista "Mitos, Relatos y Leyendas de Samaipata" y "La Babilonia andina", una historia basada en la Potosí colonial. Su nombre completo es César Leonardo Herrera García, y sus padres son Leiza García y Julio César Herrera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario