viernes, 15 de octubre de 2010

Un libro refleja la pasión de Luis Espinal por el cine

El Espacio Simón I. Patiño de La Paz y la Cinemateca Boliviana rinden un homenaje póstumo a Luis Espinal al cumplirse 30 años de su asesinato con la publicación del texto de su autoría El lenguaje de las historietas y el cine. La obra del gran maestro y pedagogo del audiovisual, hombre comprometido con la justicia y la democracia, será presentada en un acto el 19 de octubre.

El padre Espinal, más conocido como Lucho, al referirse a su texto, dijo: “En este libro se enfoca el tema del lenguaje de las historietas para relacionarlo con el lenguaje del cine. (...) en esta publicación, al analizar el lenguaje de las historietas, pretendo, pues, exactamente esto: ofrecer un método cómodo y fácil de acercamiento al estudio cinematográfico y televisivo”.

El sacerdote jesuita Luis Espinal Camps fue enviado a Bolivia como misionero en la década de los sesenta. Luchó de forma irrenunciable por la defensa de los Derechos Humanos. En el país se desempeñó como sacerdote, cineasta, comunicador social y radialista en su labor pastoral. Pero sus posturas contrarias a las dictaduras y su apoyo a los movimientos mineros, especialmente a las huelgas antidictatoriales de trabajadores y sus esposas, una de las cuales fue Domitila Chungara, le valieron enemistades.

Lucho Espinal fue detenido por paramilitares, brutalmente torturado y asesinado el 21 de marzo de 1980. Dicho asesinato fue planificado, en enero de ese año, por el propio García Meza, junto a Luis Arce Gómez y Guillermo Moscoso. Entre sus libros producidos sobresalen los títulos: Géneros cinematográficos (1972), Historia del cine 1945 - 1970 (1972) Lenguaje cinematográfico (1972), Directores de cine (1973), Psicología y cine (1947), El cine frente a la televisión (1975), Simbología en el cine (1976), Narrativa cinematográfica (1976), Sociología del cine, El cine como mito (1979), Técnica del guión cinematográfico (1980), El grito de un pueblo (Lima 1980) y Oraciones a quemarropa (Lima 1988).

El crítico de cine Pedro Susz expresa en el prólogo del texto de espinal: “Pocos meses después del asesinato de Luis Espinal, casi tres décadas atrás, recibimos en la vieja Cinemateca Boliviana (...) varias carpetas conteniendo un trabajo inédito de Lucho Espinal. De alguna manera ese trabajo redondeaba la colección de ensayos publicados a principios de los 70 del siglo pasado por Editorial Don Bosco bajo el título genérico de ‘Notas Críticas’, pero las circunstancias políticas impidieron su impresión”.

COMPROMISO EN LA LUCHA

El compañero Lucho llega a La Paz en agosto de 1968. Entre 1969 a 1979 es crítico cinematográfico del matutino Presencia. A partir de los setenta produce el programa de televisión En carne viva en el canal estatal; posteriormente empieza a trabajar en radio Fides. En 1976 es cofundador de la Asamblea de Derechos Humanos. Ese mismo año colabora en el rodaje del filme Chuquiago. En diciembre de 1977 participa durante 19 días en la huelga de hambre que fue el inicio del retorno a la democracia, y en 1979 fundó el semanario Aquí, del cual fue su director hasta su muerte.

Su lucha social es un ejemplo de compromiso con el pueblo, los derechos humanos y la defensa de la democracia.

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