EL GANADOR DEL PREMIO NACIONAL DE NOVELA 2013 DICE QUE HAY UNA NUEVA GENERACIóN DE ESCRITORES QUE ESTáN SACANDO IMPORTANTES PUBLICACIONES

Hace nueve días, el jurado del Premio Nacional de Novela dio a conocer su fallo que ubicó por segunda vez a Cé Mendizábal, en lo más alto del galardón, porque el escritor obtuvo por segunda vez esa distinción con su obra "Pasado por sal".

P.- ¿Qué significó para usted ser ganador del Premio Nacional de Novela por segunda vez?

R.- Una alegría muy grande, por supuesto. Este premio tiene la característica de brindar la posibilidad de volver a participar después de tres años de haber ganado. En mi caso transcurrieron casi quince años. Hoy siento que no está mal que un premio tenga los rasgos de un concurso, de una carrera con ganador y perdedores. Ocurre que, por un lado y, a pesar de ser un país pobre, hay una importante labor editorial, que aunque es buena, en una enorme mayoría de casos, no es valorada, a veces ni siquiera reconocida en la hora de su publicación. Creo que por hoy el apoyo de un jurado es algo importantísimo para convencer al público a leer y sacar sus propias conclusiones.

P.- ¿Puede darnos un resumen del argumento de la obra que lo hizo ganador del Premio Nacional de la Novela 2013: “Pasado por Sal”?

R.- "Pasado por sal" está conformada por varias historias que corren en dos tiempos distintos. En los 70 y los 90. En la que debe ser una de las venas principales se habla de una mujer misteriosa y muy bella, que bailaba en un local paceño en los años 70. Pero esta historia se imbrica con otra de características similares que sucede en los 90, donde también hay otra mujer hermosa que también es una chica de night club y que tiene un nombre muy similar. Entonces hay un poco de amnesia, de confusión y curiosidad en varios personajes, porque por más que aparecen muchas cosas parecidas, son, para empezar, dos momentos políticos muy distintos. Cierto, hay otras venas, cuyo descubrimiento voy a dejar al lector acucioso.

P.- ¿Cuál es su estrategia para llegar al lector?

R.- Como decía Borges, con mejores palabras, en la literatura debe operar un principio de seducción. Debo ser capaz de seducir, enamorar y atrapar al lector, porque de otro modo éste no va a poder pasar de la segunda página. Es algo que me ha creado conflicto, puesto que hasta el día de hoy siento que el mero principio de la novela es un poco rígido… Quizá, si se vence este escollo, el resto sea mucho más potable.

P.- ¿Cómo describe el momento que atraviesa Cé Mendizábal?

R.- Es bastante complicado referirse a uno mismo. He cruzado con esta novela los últimos quince años de mi vida, pero solo hacia abril o mayo de este año pude sentirme cómodo y confiado en ella. Solo en ese momento llegué a la certeza de que había dicho todo lo que quería decir y en un tono que era el adecuado. Antes de eso, el artefacto hacía aguas por muchos, por demasiados lados y me fue necesario repetir, reformular, editar, reescribir, suprimir algunos personajes y aumentar otros.

P.-¿Podría hacer un análisis de la literatura boliviana?

R.- Solo uno muy parcializado porque por hoy estoy bastante alejado del estudio crítico. Creo que hay voces nuevas muy importantes: Sebastián Antezana, Rodrigo Hasbún, Maximiliano Barrientos, Liliana Colanzi, Wilmer Urrelo, Rodrigo Urquiola entre varios otros. Ellos se han sumado a voces como las de Edmundo Paz Soldán o Giovanna Rivero, que están haciendo un buen trabajo afuera y son cada vez más reconocidos. Más temprano que tarde me parece que son ellos quienes van a terminar por cambiar la cara literaria de nuestro país.

P.- ¿Percibe una tendencia entre todas las obras ganadoras del Premio Nacional de Novela en diferentes versiones?

R.- No, porque sencillamente no las he leído todas. Sé que varias se han enclavado en lo urbano, en eso que el arquitecto Rem Koolhaas denomina las ciudades genéricas. Ciudades a lo largo y ancho del mundo, que en muchos aspectos

son idénticas, y que por eso mismo nos terminan convirtiendo a todos en ciudadanos de todas partes.

P.- Para usted ¿quién es el mejor novelista?

R.- No hay sólo uno por hoy.Mi gran descubrimiento actual es el desaparecido David Foster Wallace, que tenía muy seria posibilidad de convertirse en uno de los más grandes no sólo de nuestro tiempo, sino de mucho más que eso.