Si hay un lugar que visitan los amantes del cómic, no sólo para comprar sino también para informarse y debatir, es Cómic Shop. Es la primera tienda especializada en este género artístico que se abrió en la ciudad de La Paz a principios de la década de los 90’. Este espacio, que alberga más de tres mil historietas y otros productos, es visitado por personas de todas las edades.
La tienda, ubicada en el edificio V Centenario del barrio de Sopocachi, es un espacio con dimensiones reducidas, pero con unas vitrinas capaces de conquistar hasta a los que no son fanáticos de las historietas. En las estanterías se puede observar una variedad de cómics, fotografías autografiadas, muñecos, llaveros, videojuegos y todo lo relacionado con las historietas.
"Un día estaba pasando por la tienda y me llamó la atención un cómic de Superman, entonces decidí comprarlo. Luego de leerlo por primera vez, me gustó y ahora colecciono estas maravillosas obras”, cuenta el fanático Martín Álvarez, de 22 años, quien siempre lleva en su mochila una historieta.
La esencia del lugar perdura en el tiempo
El amante de las historietas y gerente propietario de Cómic Shop Bolivia, Daniel Tejerina, de 30 años, cuenta que el objetivo del lugar no sólo es vender cómics y generar dinero, sino también ofrecer un espacio para el encuentro de los apasionados del cómic, de quienes gustan de empaparse con lo último, intercambiar historietas, generar debates e incluso aportar con alguna pieza que resulta difícil de encontrar en el mercado nacional e internacional.
"Esto hace que la tienda tenga un valor adicional. Yo disfruto mucho cuando la gente viene con esa actitud porque sé que le están dando un valor significativo al cómic y que no será un compilado de papeles que quedará en el olvido en algún lugar, sino que tendrá un buen uso y cuidado”, dice Tejerina, quien desde su niñez descubrió la pasión por los cómics.
A pasar de que este espacio cambió de dueño tres veces -el primero fue Francisco, luego Gladys y, finalmente, Daniel- la esencia de la tienda no ha cambiado ni perdido vigencia. Cada uno de ellos fue capaz de mantener el espacio como un lugar de encuentro, abrirlo a nuevos aficionados y hacer que Cómic Shop sea un espacio donde más de uno adquirió su primer cómic.
"La primera vez que compras un cómic es algo que nunca se olvida y se lo guarda como el tesoro más preciado”, dice el fanático Juan Pablo Machado, de 29 años.
La primera tienda de La Paz
El fanatismo por los cómics llegó a La Paz en el siglo pasado. Sin embargo, en ese entonces no existía una tienda que comercializaba las historietas. "Para adquirirlas se tenía que hacer un pedido del exterior, en la mayoría de los casos a Estados Unidos, era complicado”, resalta Tejerina.
Ante la ausencia de este tipo de negocio, durante una reunión de amigos fanáticos de los cómics, se creó la primera tienda de la ciudad bautizada como Cómic Shop.
"Esta es la primera tienda de comics de La Paz; eso nadie puede discutir. Se inauguró a principios de la década de los 90’. Es la segunda de Bolivia; tengo entendido que la primera la abrieron en Santa Cruz”, asegura el gerente propietario de Cómic Shop.
Tejerina, quien se considera un nerd extrovertido, cuenta que llegan a la tienda personas de todas las edades, desde niños de 10 años, acompañados por sus padres, hasta adultos de 50. El encargado del lugar dice que los hombres prefieren consultar antes de adquirir una historieta, mientras que las mujeres que ingresan y piden "de forma directa” lo que están buscando.
"Las personas que vienen a buscar cómics toman dos factores en cuenta: el género y el autor. Por ejemplo, los géneros más demandados son de superhéroes y fantástico; el de terror es el que menos lo compran. En cambio, cuando hablamos de escritores, los más buscados son Frank Miller, Alan Moore y Grant Morrison, se podría decir que ellos son los más influyentes”, explica Tejerina.
El cómic más "pesado”
El cómic más "pesado” que llegó a la tienda fue Crossed, del género Gore, una serie de diez números cuyo guión fue escrito por Garth Ennis y el dibujo trazado por Jacen Burrows. Esta historieta narra un "futuro cercano” donde la tierra fue infectada por un virus que transforma a las víctimas en seres maniacos homicidas.
"Sin duda, Crossed fue el cómic más pesado que estuvo en la tienda. El número más fuerte de todos titula Psicópata; es un cómic que hace doler la cabeza pero que a mucha gente le gusta. Una vez llegaron a la tienda dos ejemplares y se vendieron en pocas horas”, explica Tejerina.
Los cómics nacionales
Las estanterías de Cómic Shop no sólo exhiben material producido en el exterior sino también los que llevan firma boliviana. En el último tiempo, un aspecto que comenzó a considerar la tienda fue potenciar el talento boliviano e incentivar a los fanáticos a producir historietas.
Entre las obras nacionales que se exhiben en las vitrinas de Cómic Shop están los Cuentos de Cuculis y Primaria Furiosa de Álvaro Ruilova además de El Lustra, cómic creado por Ruilova y Damián Moreno.
A futuro abrirán una sucursal en Santa Cruz
El gerente propietario de Cómic Shop, Daniel Tejerina, anunció que está trabajando en un proyecto para abrir una sucursal en Santa Cruz y otra en la zona Sur de La Paz, en los próximos meses. En ambos espacios se comercializarán cómics y, además, se promoverá que fanáticos desarrollen sus propias historietas llevando el sello nacional.
"En la zona sur de La Paz y en Santa Cruz no hay tiendas de cómics. La única diferencia seria el tamaño de las tiendas, queremos que sean más grandes para ofrecer una amplia variedad y también un espacio para que la gente vaya a conversar y debatir sobre cómics, algo que caracteriza a Cómic Shop”, dice Tejerina.
Asimismo, explica que la idea surgió ante la "alta” demanda que hay en Santa Cruz y en la zona sur de La Paz. "Mucha gente nos llama y pregunta cuándo vamos a abrir una tienda en estos lugares”. "Estamos buscando un terreno o lugar para la sucursal, no falta mucho para hacerla realidad”, indica.
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