lunes, 18 de mayo de 2015

El “Tío de la Mina”, en la nueva novela de Sisinia Anze Terán

El legendario “Tío de la Mina” es el protagonista de la nueva novela de la escritora boliviana Sisinia Anze Terán, “Las Crónicas del Supay”, la misma que tuvo una novedosa y deslumbrante presentación en el Club Social de Cochabamba, cuyos salones se ambientaron con la participación de miembros del Grupo de Artes Escénicas “Deja Vu”, que lucieron atuendos de época. El acto alcanzó mayor lucimiento con una brillante representación lírica del eximio barítono Gastón Paz Zegarra, además de la dramatización de una parte de la novela, dialogada y cantada por dos destacados intérpretes, Günther Revollo Soria y el tenor Jorge Villarroel Ribera.

El protagonista de “Las Crónicas del Supay” es Günther Maier von Oberkirch, nacido en Alemania en el siglo XIV. Según la autora, puso ese nombre a su personaje inspirándose en uno de sus compañeros de colegio que sobresale por su dedicación a la investigación histórica y a la actividad cultural, el mencionado Günther Revollo Soria.

Haciendo uso de la palabra, Sisinia Anze Terán agradeció efusivamente a los participantes en el acto, así como a toda su familia y a la escritora Teresa Constanza Rodríguez Roca, por su apoyo, remarcando además el trabajo de corrección de Carlos Revollo Herbas.

En el mismo acto, a través de la proyección de un audiovisual con una impactante sucesión de imágenes se fue relatando un resumen de la novela: Dos parejas de turistas visitan una de las minas de Potosí y en un desafortunado accidente una de las mujeres del grupo cae a una profunda galería. Al verse atrapada, busca una salida desesperada e infructuosamente. En medio de una abrumadora red de galerías se topa con una gruta en la que, entre varios objetos antiguos encuentra un diario que relata la vida del protagonista y lo empieza a leer. El diario consigna una serie de experiencias y eventos desafortunados que él confronta, desde una de las peores epidemias de la historia que se desató en Europa a fines del siglo XIV y que se llevó a la que fue su primer gran amor. En esas circunstancias fue convertido en un ser inmortal, sufriendo el pesado proceso de adaptación a su nueva condición y sintiéndose, desde el comienzo de su vida sobrenatural, invadido por una tormenta de sentimientos que, irónicamente, lo acercan más a lo humano.

El diario también relata los viajes del protagonista por diferentes latitudes, los asombrosos personajes que va conociendo, su llegada al Nuevo Mundo junto a Cristóbal Colón, sus pasiones y desengaños y el sufrimiento al que es sometido antes de encarnar al Supay. Una parte fundamental de la obra relata su llegada a Abya Yala, ahora América, donde emprende una exploración por esas misteriosas tierras hasta llegar al enigmático Tiawanaco. Allí conoce a un sabio que le va enseñando los usos y costumbres de su pueblo. Es también testigo de los sobrecogedores dramas que se desatan durante el proceso de la colonización española. Pero su extraña condición empieza a generar especulaciones, por lo que se ve obligado a no permanecer por mucho tiempo en un solo lugar. Su intolerancia a la luz del Sol y su inusitada manera de vivir en la oscuridad, le van ocasionando una serie de conflictos. En medio de esa tensa situación le vuelve a aflorar el sentimiento más bello de la vida humana, el amor. Pero esta vez, la joven indígena de la que se enamora, también le es cruelmente arrebatada, sumiéndole en la más terrible desolación y obligándole a recluirse en las profundidades de una mina. Así comienza la leyenda de uno de los personajes más controversiales del imaginario andino, el Supay, ahora conocido como el “Tío de la Mina”.

El audiovisual también fue intercalado con intervenciones de la autora quien remarcó que el Supay es un semidios en la mitología andina y reina en las profundidades de la mina. Agregó que antropólogos, investigadores y escritores se ocuparon de este personaje y aunque muchos piensen que es el mismo demonio, para los mineros es un protector al que le rinden pleitesía. Ante la sola idea de perecer bajo sus poderes, le hacen ofrendas pidiéndole permiso para entrar en la mina, encontrar el metal ansiado y salir de ella sanos y salvos.

Con “Las Crónicas del Supay” la autora nos permite aventurarnos en un mundo de fantasía que tiene mucho de realidad. Logra que levantemos los pies de la tierra en un vuelo magnífico e interminable por espacios enrarecidos, abordando lo misterioso e incomprensible, que está más allá de lo que pueda entender nuestra razón, lo sobrenatural. Con su gran imaginación logra crear mitos en una atmósfera de misterios y angustias que acechan al espíritu humano.

El suspenso creado por su fértil imaginación deleita al lector con jaspes de fantasía en cada uno de sus capítulos, transportándolo a través del tiempo y de los continentes, con rigurosa fidelidad historiográfica. Al respecto, Sisinia Anze Terán destaca que para una precisa revisión de los pasajes históricos incluidos en su obra, también contó con la cooperación de su amigo Günther Revollo Soria.

Sisinia Anze siempre se sintió apasionada por los temas sobrenaturales. Por eso crea en sus novelas mundos salidos de su inconsciente llenos de quimeras. Mundos descritos con ambiguos tintes de fantasía, que empujan al lector a un interés que lo aleja del discernimiento entre lo real y lo fantasioso, que nos presenta sus maravillas y misterios, sus placeres y tormentos, sus esperanzas y desengaños, sus virtudes y vicios, sus grandezas y miserias, sus mitos y convicciones, en fin, esa constante y continua mezcla dual que los seres humanos perciben en sus vidas cotidianas.

Se dice que el miedo siempre ha estado presente en el diario vivir de los mineros. El miedo a los accidentes, a las enfermedades, a que se pierda la veta de mineral, a la oscuridad, al silencio de las galerías y a los demonios a los que atribuyen las causas de sus desgracias y desventuras. Los túneles abandonados y las grietas abiertas por antiguas excavaciones son los lugares más temidos porque creen que en ellos residen los malos espíritus. Por ese motivo, cuando el minero atraviesa pasadizos abandonados, cree sentir la presencia de estos entes en el murmullo de la corriente de aire, en el crujir de las piedras aflojadas, en el gotear del agua sobre los suelos de piedra y por las sombras difusas producidas por el haz de luz de su linterna. Estas vivencias que tienen un origen remoto, se encuentran en todas las culturas antiguas, incluyendo a las de Europa medieval y renacentista, que no fueron una excepción.

Las investigaciones que realiza Sisinia Anze en los campos de la etnografía y el folklore boliviano, nos acercan a sus percepciones en el ámbito minero y a su particular idea del mundo mágico y mítico de las culturas andinas. Las temáticas que utiliza la autora poseen dos características principales, que a menudo aparecen mezcladas. Por un lado son temáticas que nos cuentan fragmentos de la historia universal, aquellos que están impregnados de misterio y enigmas aún sin poder comprender y, por otro lado, el toque irreal, fantasioso y mágico que da a la trama un tinte exótico y atrayente para el lector.



OBRAS DE LA AUTORA

Anteriormente Sisinia Anze ya presentó las siguientes obras dentro del campo narrativo, principalmente en el de la novela de suspenso: La Clonación de Cristo, Las Últimas Profecías, La Lanza de Longinos y El Abrigo Negro. Esta última fue reconocida por la Dirección Departamental de Educación de Cochabamba como una importante fuente de información, en cuanto a la cultura boliviana, y ya es parte del programa pedagógico en unidades educativas del país.

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