viernes, 29 de mayo de 2015

Historia, poemas y canciones se reúnen en libro de Hugo Monzón



Hace 20 años atrás, a insistencia de unos amigos, el integrante de los “Montoneros de Méndez”, Hugo Monzón Cardozo, elaboró un folleto, casi libro con sus primeras composiciones, años después lo reeditó con material ampliado y lo nombró “Memorias de un trovador”.

El que presenta esta noche reúne esos trabajos, además de material inédito y actualizado con el título de una de sus composiciones más emblemáticas, “Morir Cantando”.

Presentación
El volumen, que será presentado hoy a las 19.00 en el auditorio de la Casa de la Cultura, también contiene apuntes biográficos del autor nacido el 1 de abril de 1941 en la zona alta de Tarija en un lugarcito llamado Quebrada Honda, casi frontera con la Argentina.
Allí sus padres habían instalado un hotelito, por un paraje en el que se construyó el primer camino carretero entre Villazón y Tarija, en la década de los años 20 del siglo pasado. “Había una escuelita rural en esa región en el que me eduqué hasta el tercer grado, luego me vine a estudiar a esta ciudad”, empezó a contar el cantautor.
Vivió en San Roque, a los 14 años, sus amigos y él empezaron sus primeros aprendizajes con la guitarra, algo que sacó de su padre, desde ese tiempo siempre estuvo al lado de ese instrumento y en actividades musicales tanto en el barrio como en el colegio que lo tomaban en cuenta para cantar en las horas cívicas y otros eventos.
En esa época escribió una cueca al club que tenía en la zona, “Campero”, y con sorpresa comprendió que tenía aptitud para componer porque el tema se convirtió en un éxito en el barrio.
Ese acicate sirvió para seguir el camino de la composición y creación musical, y la inspiración le venía de cualquier lado, desde ver a una chapaquita que lavaba ropa en Tomatitas y le salió el tema “El arroyo enamorado”, canción muy conocida. De esta manera empezó esa sucesión de canciones que al momento, según Monzón, deben llegar a 200, aunque el libro recoge un poco más de 150.
“La inspiración me ha salido cuando me ha impactado algo, el amor o la injusticia que pasa en Bolivia en ciertos sectores, la muerte de algún personaje, son cosas, vivencias y, no sé, tengo facilidad par hacer la letra y la música, sin saberla escribir o leerla, la hago empíricamente”, contó al conversar con El País eN.
Satisfecho porque su trabajo guste, también recordó a su grupo los Montoneros de Méndez, que en 1967 tomó ese nombre, pero que ya había sido creado dos años antes bajo el apelativo de “Los Arrieros“.
Resulta que ese año se recordaba el sesquicentenario de la batalla de la Tablada; entonces, como era una fecha tan importante, alguien del grupo sugirió cambiar el nombre y fue un 15 de abril de 1967 el día que estrenaron el que llevan durante 48 años.
El impacto fue monumental en es época, los dirigía el profesor Nilo Soruco, estaba con ellos Vicente Mealla y otros destacados intérpretes, coparon la atención de todo el país, fueron invitados a la Unión Soviética, en ese momento visitaron países como México, Argentina. “Todo era solo satisfacciones. Para mí, la música es una pasión”, reveló Monzón.
El libro, además recoge memorables fotografías de distintos momentos de la vida del artista, su participación en el festival latinoamericano del folklore en 1964, su paso por el grupo los Embajadores, los Montoneros de Méndez, sus compañeros de canto, sus visitas a distintos países, con los Fronterizos, etc.



El perfil del artista Hugo Monzón Cardozo

Nació el 10 de abril del año 1941 en Quebrada Honda, provincia Avilés - Tarija. Hijo del profesor José Manuel Monzón Flores y Emma Cardozo Ruiz. Casado con la profesora Delia Alvarado Flores. Hijos: Alba Delia, Liuba y Hugo Manuel. Educado en la Escuela Narciso Campero, Colegio Nacional San Luis y Colegio nocturno Eustaquio Méndez. Es maestro normalista rural con especialidad en lenguaje y literatura en el ISER (Instituto Superior de Educación Rural), fundador y director del conjunto folclórico Los Montoneros de Méndez (1967), Estudiantina Tarija (1998) y del Grupo Añoranzas (2000)

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