Nacido en el departamento de Oruro, y casado con una cruceña, su inquietud principal era la de criar a sus dos hijos con los saberes de ambos departamentos, pero al ver que no existía un método que englobe a las distintas culturas (de occidente y oriente) decidió participar en el proyecto Ideas Emprendedoras, el año 2010.
“Presenté un proyecto de material didáctico en tela, rescatando nuestros valores, como el idioma quechua que ahora mucha gente pareciera que tiene vergüenza de hablar”, señaló.
Cuando Tala presentó el proyecto, entre 890 participantes, se enteró de que había quedado clasificado para una segunda etapa y luego en una tercera fase, obteniendo el lugar número 12.
Luego recibió una llamada de una empresa de La Paz que le manifestó su interés por el proyecto.
“Nos pidieron ver la fábrica de los productos, pero nosotros solamente teníamos la idea”, manifestó Tala.
Gracias a una invitación, fue a participar en la rueda de negocios de la Exposur, lo que le animó a elaborar muestras de su producto.
En esta primera feria se le abrieron las puertas para lo que hoy en día es Avanza.
Grande fue la sorpresa de Tala al ver que en esa feria, a la que llevó un libro de quechua, hecho en tela, interesaba no solamente a los bolivianos, sino también a los argentinos, chilenos y peruanos, países donde también se habla este idioma.
El año 2011 se animaron a participar en la Feria Internacional de Cochabamba, y fue en esa oportunidad cuando empezaron a vislumbrarse interesantes perspectivas para su emprendimiento.
A partir de esa experiencia Avanza comenzó a producir cuatro líneas de materiales didácticos: uno de ellos es el lingüístico en inglés y quechua, otro es el material montessori, los otros dos hacen referencia al aprendizaje de los números y de la Biblia.
También cuentan con libros temáticos de frutas, verduras, matemáticas y animales.
La característica de los materiales de Avanza es que son realizados totalmente en tela, por lo que los han denominado también “los libros indestructibles”.
Además de la línea de libros, la pequeña empresa cuenta con accesorios educativos, juegos didácticos educativos, calendarios y una variedad de juegos en tela.
“La diferencia que hay entre un libro de papel y uno de tela es la durabilidad”, manifestó Tala y agregó que en la etapa infantil los niños generalmente aprenden a tocar y palpar, por lo que un libro de tela le ayuda a aprender de una manera más fácil.
Los libros hechos por Avanza pueden lavarse e incluso plancharse y conservarse de generación en generación.
COMERCIALIZACIÓN
En el ámbito nacional la pequeña empresa está presente también en Santa Cruz y Tarija, con personas que se encargan de la distribución.
El mercado más grande es el local. El material está dirigido sobre todo a kinders, guarderías y colegios.
En una oportunidad los libros también fueron llevados al exterior.
“Hemos tenido un pedido grande de una persona que llevó nuestros libros a Alemania, ahora estamos a la espera de los resultados de esa exportación”, mencionó.
PRODUCCIÓN
Como sucede en la mayoría de las microempresas, Avanza solamente realiza elaboración de material a pedido.
Sin embargo, su producción de manera semanal oscila entre los 300 y 500 libros.
EXPERIENCIA
En pocos años Avanza ha logrado posesionar su producto en el mercado cochabambino, tarea que ha sido muy difícil para la pequeña empresa debido a todos los obstáculos que se presentaron en el camino.
“Lo más difícil de empezar una empresa de cero es posesionar el producto, pero hay diferentes factores con los que uno debe luchar y no desmoralizarse en poco tiempo, pues se presentan problemas como la falta de financiamiento, capital y de mano de obra calificada para trabajar”, indicó.
Reiteró que, según su experiencia, la tarea más difícil para una pequeña empresa es hacer conocer su producto.
DATOS PARA TOMAR EN CUENTA
Generación de fuentes de empleo
Avanza inició con dos personas, Martín Tala Carrasco y su esposa.
Posteriormente, el proceso de producción del material demandó la contratación de siete personas más, tres para el área administrativa y cuatro para el de producción en los talleres.
Avanza funciona en el domicilio del propietario, en la avenida Segunda.
El proceso de producción
Lo único que la empresa adquiere del exterior es la tela, que se constituye en la materia prima para la elaboración de los libros.
Todo el proceso de transformación que implica el corte de la tela, los diseños y el contenido que va dentro de los libros es producido por el personal de Avanza, explicó Martín Tala Carrasco.
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