miércoles, 11 de mayo de 2011

Cochabamba La Biblioteca Municipal evidencia años de abandono

Estantes de material nocivo para los libros, ambientes sin la ventilación ni la temperatura adecuadas, un espacio improvisado con calamina plástica y telas, cables sueltos que pueden ocasionar cortocircuito y consiguiente riesgo de incendio, falta de extintores, falta de señalización y de sistemas de seguridad, son las principales falencias que presenta la Biblioteca Municipal, según se pudo observar en un recorrido hecho por este medio ayer.

Existe un informe, elaborado en febrero pasado por un funcionario municipal experto en seguridad industrial, que recomienda climatizar la sala de libros, hacer mantenimiento del cableado eléctrico, cambiar el piso de parket que por su deterioro representa un peligro para los funcionarios, comprar un extintor y poner señales de seguridad en todos los ambientes.

“El descuido de los servicios culturales data de hace mucho, es por eso que no es subsanable a corto plazo”, dijo la jefa del Departamento de Patrimonio y Servicios Culturales, Silvia Saavedra, señaló que fue su departamento el que solicitó el diagnóstico interno; pero la implementación de las recomendaciones debe hacerse previo catálogo y registro de libros, proceso que demora entre dos a tres años.

“Esta biblioteca ha sido descuidada desde gestiones anteriores, no se tomaron en cuenta aspectos de mejoramiento de infraestructura, actualización, ni seguridad”, dijo el jefe de Bibliotecas del municipio, Edgar Tórrez.

Se estima que la biblioteca tiene entre 37.000 a 40.000 ejemplares, pero no se tiene el dato exacto porque el último inventario fue hecho hace cinco años. “Teníamos que hacer otro el año pasado, pero no se hizo por no perjudicar a los estudiantes”, dijo Tórrez.

El libro más antiguo de la biblioteca titula Leyes de Indias y data de 1.600, se encuentra bajo llave dentro de una vitrina y solo puede ser consultado para investigaciones con una autorización expresa. En similares condiciones está una de las primeras ediciones de “Don Quijote”. El resto de las obras, que todavía se pueden consultar, están guardadas en estantes de madera, un material nocivo porque puede generar hongos que dañan el papel. Lo adecuado es almacenar los libros en estantería de metal y hacer desinfección diaria.

Si bien existe un funcionario que hace empaste y refacción de tapas de los libros, no se realiza un trabajo de conservación del papel. En una de las salas se puede ver que hay libros con hojas arrancadas del empaste y tapas en mal estado. Al lado, un ambiente hecho de calamina plástica, alambre y telas para actividades del Bicentenario, potencia el riesgo de incendio que de por sí hay en el lugar.

Saavedra explicó que el diagnóstico permite gestionar presupuesto para las actividades de mejoramiento y conservación, pero el trabajo debe hacerse por fases.

Proyecciones

La jefa de Patrimonio, Silvia Saavedra, explicó que con el presupuesto obtenido para este año se proyecta comprar software para implementar la biblioteca virtual. Para esto también es preciso actualizar la catalogación de libros según las normas de la archivística actual.


En el Plan Operativo Anual (POA) de 2012 se prevé solicitar presupuesto para el cambio de mobiliario, mantenimiento de la instalación eléctrica y sistemas de refrigeración, tareas urgentes en vista del avanzado deterioro.

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