sábado, 1 de febrero de 2014

Mafalda es la estrella del Festival del Cómic de Angulema

Xavier Cocquard y agencias / Angulema, Francia
"¿Quién es esta niña tan bajita y con la cabeza tan enorme?”, pregunta una nena que no debe pasar de los cinco años de edad impresionada ante la reproducción de una Mafalda de casi dos metros que preside el salón principal de la 41 edición del Festival Internacional del Cómic de Angulema, la muestra más importante de Europa dedicada al noveno arte.
Aunque su padre, natural de Bruselas, reconoce que es un verdadero fanático del cómic, lo cierto es que tiene que leer el cartel que anuncia la exposición para absolver la duda de la pequeña Anna Louise Dufresne.
"Ma-fal-da” dice el buen hombre, mientras detrás de él, un puñado de estudiantes de comunicación social de la universidad de Reims aprecian extasiados cada uno de los dibujos trazados por Joaquín Lavado, Q uino, allá por 1976 y que reflejan, de algún modo, temas tan distantes hoy en el tiempo como la guerra fría entre EEUU y Rusia y la amenaza de un apocalipsis nuclear.
"Yo no estoy tan seguro de que el mensaje haya quedado en esa época”, afirma Albert, uno de los aspirantes a periodista.
"El autor supo captar la tensión política del momento. Pero también cabe preguntarse cuánto ha evolucionado la sociedad contemporánea para abandonar la violencia como un modo para resolver sus diferencias”, sentencia con gravedad Marie Durnat, una de las compañeras de estudio que muestra con orgullo un autógrafo de Quino, conseguido hace cuatro años en el moderno Salón del Cómic de Barcelona.

"¿Podemos hablar con el autor, con este señor Quino?”, pregunta André, tomando precisa nota de cada una de las viñetas expuestas en paneles de venesta.
"No, no será posible”, responde Raymond Cabré, uno de los organizadores del evento.
Joaquín Lavado, de 81 años, excusó su presencia en el festival francés debido a su delicado estado de salud. Sin embargo, Quino escribió una reseña a propósito del 50 aniversario de su personaje más emblemático.
"Mafalda, quizás no es tan conocida en Francia o Bélgica, aunque se hicieron algunas traducciones. Pero sabemos y reconocemos su importancia como un elemento fundamental para comprender esa América Latina contestataria hacia un sistema capitalista que oprimía a los más pobres mientras enriquecía a una minoría soportada por la violencia de los militares”, explica el periodista belga y crítico de cómic, Jean Marc Vidal.

N o le falta razón a Jean Vidal. Según escribe el especialista en cómic, Javier Coma, "Mafalda permitió a los latinoamericanos protestar contra las dictaduras bananeras y de paso, entretener a varias generaciones que disfrutaban identificándose con las ocurrencias de una niña lejos de ser común y silvestre”.




Crónica desde un oasis
Pero Mafalda no está sola ni mucho menos en Angulema.





De hecho, esta ciudad del sureste de Francia es hasta el 3 de febrero la capital del cómic y pasa de 40.000 habitantes estables, a cerca de 200 mil. Ahí es nada.
Mucho tiene que ver con todo esto el hecho de que, en Francia, la "bande dessinée” es un fenómeno con abundante presencia en los suplementos culturales, en cientos de librerías especializadas por todo el país y en unas ventas que alcanzan en algunos casos los 100 mil ejemplares.
No es extraño, por lo tanto, que la mayoría de visitantes sean franceses de todas las edades que profesan cierta devoción esotérica por los cuadritos y los bocadillos, las historias contadas en una página, a color o en blanco y negro, eso es definitivamente lo de menos.
El festival, por lo tanto, es uno de esos oasis para comiqueros privilegiados que comparten su pasión con cientos de fanáticos llegados de todo el mundo, ávidos de contar su experiencia como voraces depredadores de viñetas de todo tipo.
Desde los mangas japoneses hasta los superhéroes estadounidenses y desde la maestría ya clásica de Moebius hasta los nuevos ilustradores latinoamericanos, el avance de la industria del cómic responde a un interés que trasciende a los niños y adolescentes.
Un arte para todos
"No es sólo para niños, es un género con una historia de más de un siglo y una dilatada galería de clásicos. Es objeto de subastas millonarias en internet y de tiradas millonarias en países como Francia, Bélgica o Italia, por no hablar de los mencionados EEUU y Japón”, agrega Javier Coma en un anexo de La Enciclopedia del Cómic (Editorial Bruguera 2010).
A modo de ejemplo, basta leer el magnífico tratado El cómic como arte secuencial, publicado en 1985 por el maestro dibujante y guionista americano Will Eisner para caer en cuenta del valor del cómic en tanto que cultura e industria.
Y si no, que se lo digan a los empresarios de Hollywood, la meca del cine, que un buen día cayeron en la cuenta de las infinitas posibilidades de traslación de la viñeta al fotograma y empezaron a comprar derechos y licencias como locos a precios de oro.

Pero volvamos a nuestra cumpleañera homenajeada, la inefable Mafalda.
Como sucede cada año, también es posible reconocer a una más que generosa legión de fanáticos recién llegados de América Latina. Su carácter bullicioso y alegre resulta inconfundible.
Bastián Lafourcade, a pesar de su apellido, es argentino, de Rosario, "como el papa Francisco”, dice con orgullo.
Bastián, de 43 años, lee cómics desde que tiene uso de razón, y confiesa que "perdió su virginidad cultural con Mafalda”.
"Mi padre me obsequió uno de esos libros apaisados de Mafalda y, lo digo sin mayor problema, eso fue amor a primera vista. Me gustaban los dibujos de trazo sencillo, esquemático, si cabe. Pero luego, con el paso del tiempo, me sedujeron las reflexiones lógicas de una nena que hablaba por el argentino de a pie sin miedo a los milicos que gobernaban el país”.
Ciertamente Quino tuvo la capacidad creativa para criticar la sociedad en que vivía desde una posición complicada, impregnada de censura y violencia.
Hoy, ese mensaje, lejos de pertenecer a una época pasada, mantiene su relevancia desde la perspectiva de la pléyade de lectores de Mafalda identificados con su irreverencia social y, claro, su cándido inconformismo.

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