Publicaciones en remate y una presencia mayoritaria de lectores jóvenes marcaron la jornada de cierre de la VIII Feria Internacional del Libro de Cochabamba (FILC), ayer en ambientes del coliseo de la Universidad Mayor de San Simón.
Los organizadores mostraron su satisfacción al sumar cada vez más la presencia de jóvenes visitantes, tanto de colegios como de universidades.
“Antes no superaba el 20 por ciento ahora podríamos decir que alcanzó hasta un 40 por ciento ”, estimó el gerente de la Cámara del Libro Cochabamba, Hamilton Luján.
Informó que posiblemente dos acciones fortalecieron la presencia de jóvenes. La primera, el establecimiento de una alianza con la Dirección Departamental de Educación (DDE) que permitió una importante participación de unidades educativas, tanto de Cercado como de provincias.
La segunda, la instalación del evento en predios universitarios que facilitó el acceso a estudiantes de esta casa superior de estudios.
Pero, además, esta última acción permitió, según Luján, democratizar la Feria. “Se superó la brecha imaginaria entre el norte y el sud de la ciudad”, dijo al explicar la dificultad que los barrios periféricos tenían para llegar hasta el lugar del evento.
El oficial superior de Culturas de la Municipalidad, Uvaldo Romero, coincidió con la importante participación de jóvenes y remarcó que para la siguiente versión será necesario enfatizar más en la difusión y promoción. “Hubieron más de sesenta expositores pero podrían estar más”, dijo.
Por su parte, Luján destacó también la participación de los invitados de honor, que este año lo remarcó Italia.
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