miércoles, 14 de noviembre de 2012

“Dios ni castiga ni condena”, libro póstumo de Iriarte

El mensaje de un ser supremo que es “todo amor” es el “testamento” que dejó Gregorio Iriarte en “Dios ni castiga ni condena”, obra póstuma del sacerdote oblato, investigador social y docente, recientemente fallecido.

El libro será presentado el viernes 16 de noviembre a las 18:30, en el aula magna de la Facultad de Teología de la Universidad Católica (Av. Ramón Rivero esq. Oruro). Será comentado por Marta Orsini Puente, compiladora del trabajo; el padre jesuita Víctor Codina, quien además dará la charla “El profetismo hoy”; el sacerdote oblato Guillermo Siles y el representante de Kipus -editora del trabajo-, Pedro Camacho.

“Quiero dedicar este mi último libro a mis asiduos lectores, al pueblo de Bolivia que tanto me ha dado y al que he tratado de ayudar con mi cercanía, con mi palabra, mis escritos, que es lo único que sé hacer. Lo entrego en calidad de testamento que me sale desde lo hondo de mi corazón en esta etapa final de mi vida”, dijo Iriarte en la introducción del libro, la cual tuvo que dictar a Orsini en sus últimos días, aquejado por una fibrosis pulmonar de la que murió, a los 86 años, el pasado 10 de octubre.

La publicación, un compilado de artículos de Iriarte que no fueron difundidos en prensa, se divide en tres partes: “Dios ni castiga ni condena”, “Las imágenes de Dios” y “El infierno y el purgatorio”. El religioso de origen español (Navarra, 1925), que llegó a Bolivia en 1964, sostiene la tesis teológica de que “Dios es por esencia amor”, de ahí que mal podría castigar.

“Cuántas veces -se preguntó Iriarte- nos han dicho: si te portas mal, Dios te va a castigar. Incluso de mayores hemos desarrollado la teología de temor. Si recorremos la vida de Jesús, él fue amigo de publicanos y pecadores, no condenó a nadie; a la mujer pecadora le dijo: vete en paz y no vuelvas a pecar. Jesús es liberador, no condenador”.

Orsini, quien por más de tres décadas colaboró al oblato en diversos trabajos, señaló que en la última etapa de su vida el autor deseaba “dar un mensaje de fe, de que todos nos acerquemos a Dios porque es el único que da sentido a nuestras vidas, pero sin perder el compromiso social”.

Iriarte, reconocido como uno de los más importantes defensores de los Derechos Humanos y la democracia boliviana, es autor de títulos que, por su profundidad y utilidad, han educado a varias generaciones. Algunos de los más conocidos son “Análisis crítico de la realidad” (ya con 17 ediciones), “¿Qué es una comunidad eclesial de base?” (13 ediciones) y “Formación en valores” (nueve ediciones).

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