El erotismo a la boliviana plasmado en libro de viñetas

Con el ánimo de romper arquetipos y las maneras “correctas” de mostrar artísticamente el erotismo, Alejandro Archondo presentará hoy a las 19.00, en el Auditorio de la Casa de la Cultura el libro Grafika Erótika, el primero que aborda de manera ilustrada la sexualidad a la boliviana.

Hablar de sexo
El libro, publicado por la editorial Lengua Viperina, no sólo muestra los trabajos de “Arxondo”, seudónimo de Alejandro, sino también de artistas como Susana Villegas, Jessica Freudenthal, Christian Kanahuaty, Frank Arbelo y Verónica Avendaño.
Arxondo explicó que la obra recoge dos años de trabajo con el objetivo de mostrar el contexto del erotismo boliviano e interpelar, mostrar, poner sobre la mesa y sacar a luz algo que se da en el país, pero cubierto con una especie de velo. “Hablar de sexo, de erotismo, se habla; pero de manera casi muy cuidadosa y políticamente correcta”, agregó.
Por lo tanto, en este libro trata de romper eso arquetipos y estereotipos de un erotismo que casi siempre está dentro de un contexto ideal, del cuerpo perfecto súper bien formado,-detalla el autor- pero que desencadena una serie de problemas a “personas como yo, gordito calvito con rollitos y de alguna manera provocan inconvenientes como las violaciones y la trata de personas, que es una reacción en cadena de esa falta de explicar de manera natural, amplia sobre lo que es el erotismo en el mundo”.
Arxondo sostuvo que vivimos en una sociedad latinoamericana de doble moral que es necesario romperla de una manera adecuada y mostrar un panorama del erotismo boliviano a través del arte gráfico con distintas escenas y situaciones de nuestra sociedad, en principio desde el contexto paceño, pero que después se dio cuenta que el espectro se fue ampliando y de manera natural terminó mostrando lo que pasa en Bolivia.
Según la presentación del texto, este ejemplar se propone “un recorrido íntimo y picante por el erotismo con sabor boliviano a través del fascinante mundo voyeur, del fisgón o fisgona, para convertirnos en uno más de ellos o ellas, pero con el condimento extra de amigos y amigas que con sus propuestas nos acompañan en este viaje, haciendo que el mismo sea todo, menos plácido y tranquilo”.